Dos personas muertas en un saqueo e incendio de un supermercado, dos civiles heridos a bala durante un control militar, 103 incidentes graves por disturbios y 716 detenidos es parte del balance los hechos de violencia ocurridos entre la jornada del sábado y la madrugada de este domingo.
Así lo informó esta jornada el ministro del Interior, Andrés Chadwick, al dar cuenta del primer toque de queda en democracia aplicado en las regiones Metropolitana, Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins y Concepción que están bajo estado de emergencia.
La autoridad indicó que el vandalismo de anoche generó 50 atentados a la propiedad pública y privada en Santiago y que en regiones estos sumaron 53 en las últimas horas. Asimismo, se contabilizaron siete buses incendiados en Santiago y ocho estaciones de metro con serios destrozos.
Entre los lesionados hay 52 carabineros en Santiago, 10 efectivos policiales en regiones y respecto de civiles en esa condición se han recibido denuncias de 5 en la capital y 10 en las otras regiones.
Los detenidos en Santiago fueron 625, quienes pasaron a control de detención de la fiscalía y en regiones 91, dando un total de 716, a los que se suman 244 por no respetar el toque de queda.
El secretario de Estado dijo que las dos situaciones graves que se vivieron. La primera, el saqueo e incendio de supermercado en la comuna de San Bernardo, en el que fallecieron dos mujeres, y una tercera persona quedó grave con el 75% de su cuerpo quemado.
La segunda ocurrió a las 04:00 horas, durante un control militar en que resultaron heridas a bala dos personas con lesiones graves en la avenida Eyzaguirre en el límite de Puente Alto y La Pintana. La Fiscalía ya realiza la investigación.
“Frente a estos hechos tan graves que hemos vivido, como Gobierno hemos desplegado todos nuestros esfuerzos para poder responder a nuestro deber que es expresamente resguardar la seguridad de las personas y el control del orden público”, expresó Chadwick.
Para esto, dijo, se han desplegado 7.941 funcionarios de las Fuerzas Armadas y de Carabineros para efectos de desarrollar su trabajo en el cuidado de toda la infraestructura crítica indispensable para que la ciudad funcione y al mismo tiempo patrullando las calles para evitar más desmanes.
“Lo lamentamos enormemente, pero junto con ello nuestro deber es actuar, nuestro deber es cuidar a las personas y el orden público. Por eso es que como gobierno estamos haciendo todos nuestros esfuerzos para poder tener el control, garantizar la seguridad de las personas frente a estas acciones. Por este vandalismo y estos delincuentes el Presidente recurrió al estado de emergencia y a la participación de las fuerzas armadas en el orden público”, recalcó.