Literalmente dejó la pelota dando bote. Así reaccionó el ministro del Interior, Jorge Burgos, al ser consultado por la información publicada el fin de semana en el diario La Tercera que hace referencia a la declaración de Giorgio Martelli dio a la fiscalía en el marco de la indagatoria por financiamiento ilegal de campañas políticas y delitos tributarios, en donde involucra al director administrativo de La Moneda, Cristián Riquelme.

El secretario de Estado subrayó que “tengo mi opinión” sobre la permanencia de Riquelme en Palacio, pero remarcó que “no corresponde que se las señale a ustedes todavía”. “Los antecedentes siempre hay que tenerlos presente, la evaluación depende de quienes tienen a su cargo la gestión”, añadió el jefe de gabinete, que hace dos semanas tuvo un impasse con la Presidenta tras ser excluido del viaje de ésta a La Araucanía.

En su testimonio, el operador político de la Nueva Mayoría admitió haber entregado préstamos por $32 millones a Riquelme, durante el año 2013, para financiar la campaña presidencial de la entonces candidata Michelle Bachelet.

Según el matutino, los recursos fueron transferidos en ocho transacciones entre el 11 de marzo y el 16 de agosto, cuando Riquelme se desempeñaba como “administrador de la Sociedad Marketing Asesorías y Eventos Limitada (Somae), contratada para prestar servicios de administración y que pagaba los honorarios del equipo de Bachelet”, según la versión de Martelli, quien además dijo que ambos se conocieron por intermedio del ex titular de Interior, Rodrigo Peñailillo.