La actual gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, considerada una posible aliada de campaña para el exmandatario Donald Trump, confesó haber asesinado a su perra “Cricket” a balazos debido a que se trataba de un animal “indomable”.
El cobarde hecho se dio a conocer bajo el marco del lanzamiento de su nuevo libro de política titulado “No Going Back: The Truth on What’s Wrong with Politics and How We Move America Forward (Sin vuelta atrás: la verdad sobre lo que está mal en la política y cómo hacemos avanzar a América”.
Un ejemplar del título fue entregado a The Guardian, donde abordó la situación mediante analogías políticas como que era “necesario” y que había llevado a cabo el “trabajo sucio”. Asimismo, añadió que “odiaba a esa perra” y que la consideraba un “peligro”, recogió Radio Biobío.
Pese a que el libro sale a la venta el próximo 7 de mayo, ya está dando mucho que hablar, sobre todo en la víspera de las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo el próximo 5 de noviembre. De hecho, el sector demócrata ha utilizado la revelación a su favor.
El Comité Democrático Nacional realizó una campaña en la que expresó que “si quieres elegir oficiales que no presuman haber matado brutalmente a sus mascotas, vota demócrata”.
A su vez, diferentes personalidades políticas han condenado las declaraciones de Noem. Una de ellas fue el candidato demócrata a gobernador de Montana, Ryan Busse, quien apuntó a que “cualquiera que haya tenido un perro sabe lo desagradable y malvado que esto es”.
“Uno se puede recuperar de muchas cosas en la política, pero no de matar a un perro”, expresó a la BBC Meghan McCain, hija del republicacno John McCain.
En su defensa, la gobernadora aseguró a través de su cuenta de X que “aman a los animales, pero que decisiones duras como esta se toman en la granja”. Además, aclaró que el hecho ocurrió hace 20 años y que el Estado permite la eutanasia animal en caso de que el ejemplar sea considerado peligroso.