El hermano de George Floyd, cuya muerte en manos de la policía desató una ola de protestas en Estados Unidos y varios países del mundo, pidió este miércoles al Congreso que ponga fin al sufrimiento de los ciudadanos afroestadounidenses y que avance con una reforma policial.
“Ya basta. Pongan fin al sufrimiento”, espetó Philonise Floyd ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, controlada por la oposición demócrata, en el marco de una audiencia
Un día después del funeral de su hermano realizado en Houston, Floyd instó a los miembros de la corporación legislativa que “hagan los cambios necesarios para que las fuerzas de orden sean la solución y no el problema”.
Dos días después de que los demócratas anunciaron un proyecto de ley para reformar la “cultura” dentro de la institución policial para terminar con los casos de brutalidad y de racismo, el respectivo comité de la Cámara Baja va a analizar la situación.
Las circunstancias en que falleció George Floyd el 25 de mayo pasado, puso en la mira los procedimientos aplicados por la policía, tras ser inmovilizado por un agente que lo asfixió al ponerle la rodilla en su cuello, tras ser acusado de pagar con un billete falso en un tienda.
Las imágenes en las que la víctima suplica al agente que deje de presionarlo porque “no puedo respirar” derivaron en el movimiento de protesta más importante en Estados Unidos desde el asesinato de Martin Luther King Jr. en 1968.
“Quizás al dirigirme a ustedes hoy puedo lograr que su muerte no sea en vano, que no se convierta en otro rostro en una camiseta y otro nombre en una lista”, dijo el hermano de la víctima en su alocución frente a parte de los miembros del Capitolio.
En medio del debate nacional, la policía de Houston va a prohibir la inmovilización con asfixia y el cuerpo de Minneapolis va a ser desmantelado para ser reformado y refundado.
A nivel federal la Ley de Policía y Justicia, que cuenta con el apoyo de más de 200 legisladores demócratas, busca crear un registro de los agentes que cometan abusos, facilitar el que sean juzgados y replantear los procesos de selección y entrenamiento.
Pero el futuro de este proceso es incierto si no logran sellar un apoyo de los republicanos que dominan el Senado, además de contar con el apoyo del presidente Donald Trump, que condenó la muerte de Floyd pero dio su apoyo expreso a la policía. El jefe de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, anunció el martes que encargaría al senador negro, Tim Scott, que aborde esta reflexión.