“Más no puedo pedir. Volver a Chile es un reto impresionante, un orgullo, una satisfacción. También un reto que te obliga a estar con todo, porque el paso es bastante grande”, dijo San José a Mundo Deportivo.
“Es un club que tiene buenas plantillas, futbolistas de buen pie que dicen allí. Cuando te enfrentas a Católica lo haces ante jugadores de peso y calidad. Estoy insistiendo en el club sobre el volumen de jugadores que tendré a mi disposición. Por primera vez hacen un campeonato de ida y vuelta, de febrero a noviembre. Eso significa no tener tanto estrés para salir campeones en mayo, la copa se va a jugar en fin de semana”, continuó.
Sobre la importancia de los cruzados a nivel sudamericano, el estratega fue enfático: “Católica no es sólo uno de los grandes de Chile, sino uno de los más grandes de todo Sudamérica. Es un escalón superior. Además, me permite entrenar otra vez en el fútbol chileno que está muy bien organizado. Es un escaparate que te puede abrir las puertas del mundo del fútbol”.
También tuvo palabras para lo que fue su salida de Bolívar: “No fue una decisión sencilla ni en lo deportivo ni en lo emocional, porque dejo atrás mucha gente a la que quiero y admiro”, señaló.