“El presidente ha aceptado la renuncia del canciller Luis Castiglioni, del embajador paraguayo en Brasil, Hugo Saguier Caballero, del presidente de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), Alcides Jiménez y del director paraguayo de Itaipú, Alberto Alderete”, anunció este lunes el portavoz, Hernán Hutteman.
Las dimisiones se producen “tras la decisión del Poder Ejecutivo de solicitar la anulación del acta bilateral firmada (con Brasil) en mayo, respecto a condiciones de contratación de energía de la hidroeléctrica binacional Itaipú, y devolver las negociaciones a las instancias técnicas”, remarcó un comunicado oficial.
La oposición acusó al Ejecutivo de haber negociado en secreto y en forma desventajosa para el país la firma del acta relacionada con la compra de energía de la hidroeléctrica paraguayo–brasileña, asentada sobre el limítrofe río Paraná.
Según el convenio las distribuidoras Ande (Paraguay) y Eletrobras (Brasil) acuerdan anualmente la contratación de la energía eléctrica procedente de Itaipú.
La crisis se originó tras la renuncia del expresidente de la Ande, Pedro Ferreira, quien manifestó su desacuerdo con los términos del documento suscrito que data del mes de mayo pero que recién fue develado este fin de semana.
Los legisladores opositores, mayoría en el Congreso, pidieron la salida de Castiglioni y los demás funcionarios tras advertirle que podía ser sometido a juicio político.
“Por ética y responsabilidad política, he puesto mi cargo a disposición del presidente Mario Abdo. Lamento que la tergiversación haya llevado a este estado de crispación. Todo lo actuado fue transparente y para beneficio del país”, dijo Castiglioni en un mensaje por su cuenta de Twitter.
La noche del domingo, el dimitido ministro de relaciones exteriores anunció en conferencia de prensa que el gobierno decidió solicitar la anulación del acta para descomprimir la crisis política.
Dijo que el documento acordado con Brasil “fue objeto de una enorme desinformación y manipulación política, por los intereses creados en distintas partes de la oposición”.
Itaipú, que opera desde 1984, tiene actualmente una potencia instalada de 14.000 megavatios. Brasil consume 93% de la energía de esa generadora y le compra a Paraguay su excedente.