Durante las próximas dos semanas, un grupo compuesto por 2.600 efectivos de carabineros se capacitará en la Escuela de Oficiales para afrontar la llegada de marzo, mes que ya cuenta con al menos 25 llamados a movilizaciones.
Según La Tercera, desde fines del año pasado el general director, Mario Rozas, junto al ministro del Interior, Gonzalo Blumel, se encuentran estudiando los protocolos de actuación de la institución, en lo que al interior de Carabineros denominan “plan marzo”.
De esta manera, la capacitación establecida cuenta con dos seminarios, el primero enmarcado en la “Gestión del Orden Público y diálogo con los manifestantes” que concluye este jueves su primer ciclo, y el segundo dedicado a la “Capacitación de Orden Público“, que contempla cuatro cursos hasta el 27 de febrero.
“Queremos carabineros prudentes, pero no inhibidos, en las calles”, dijo Rozas en la inauguración de los seminarios.
“Tenemos sobre nuestros hombros una tremenda responsabilidad: la sociedad nos confía la atribución de usar la fuerza. Esa facultad debe ser usada siempre con la máxima prudencia y máximo respeto de los derechos de las personas”, remarcó el general director.
Entre otros cursos, destaca el entrenamiento respecto al uso de la nueva escopeta antidisturbios, que solo será manipulada como “último recurso” luego del carro lanzaguas y lanzagases y que consiste en tres proyectiles y no 12 como la que se usaba tradicionalmente en la institución.
Otro cambio al que apunta este curso será el reemplazo de las detenciones masivas por “intervenciones selectivas”, basadas en arrestar solo a quienes porten bombas molotov, armas o agredan directamente a algún carabinero.
A estos conocimientos se suma el módulo de “Derechos Humanos aplicables a la función policial”, que busca enseñar el “concepto, dimensión valórica de los DDHH, protección a grupos vulnerables, uso de la fuerza, privación de libertad, prohibición y prevención de la tortura” tras las denuncias registradas desde el comienzo del estallido social a lo largo del país.
Finalmente, además de los 43 nuevos vehículos móviles que adquirió la institución, en marzo se integrarán nuevos drones y cámaras de video portátil para los efectivos.
“Ya contamos con aproximadamente 380 cámaras corporales. Y la meta que le hemos pedido a Carabineros es que todos los efectivos de control de orden público al mes de marzo, cuenten con cámaras corporales para poder registrar los procedimientos”, sostuvo Blumel.
Según La Tercera, desde fines del año pasado el general director, Mario Rozas, junto al ministro del Interior, Gonzalo Blumel, se encuentran estudiando los protocolos de actuación de la institución, en lo que al interior de Carabineros denominan “plan marzo”.
De esta manera, la capacitación establecida cuenta con dos seminarios, el primero enmarcado en la “Gestión del Orden Público y diálogo con los manifestantes” que concluye este jueves su primer ciclo, y el segundo dedicado a la “Capacitación de Orden Público“, que contempla cuatro cursos hasta el 27 de febrero.
“Queremos carabineros prudentes, pero no inhibidos, en las calles”, dijo Rozas en la inauguración de los seminarios.
“Tenemos sobre nuestros hombros una tremenda responsabilidad: la sociedad nos confía la atribución de usar la fuerza. Esa facultad debe ser usada siempre con la máxima prudencia y máximo respeto de los derechos de las personas”, remarcó el general director.
Entre otros cursos, destaca el entrenamiento respecto al uso de la nueva escopeta antidisturbios, que solo será manipulada como “último recurso” luego del carro lanzaguas y lanzagases y que consiste en tres proyectiles y no 12 como la que se usaba tradicionalmente en la institución.
Otro cambio al que apunta este curso será el reemplazo de las detenciones masivas por “intervenciones selectivas”, basadas en arrestar solo a quienes porten bombas molotov, armas o agredan directamente a algún carabinero.
A estos conocimientos se suma el módulo de “Derechos Humanos aplicables a la función policial”, que busca enseñar el “concepto, dimensión valórica de los DDHH, protección a grupos vulnerables, uso de la fuerza, privación de libertad, prohibición y prevención de la tortura” tras las denuncias registradas desde el comienzo del estallido social a lo largo del país.
Finalmente, además de los 43 nuevos vehículos móviles que adquirió la institución, en marzo se integrarán nuevos drones y cámaras de video portátil para los efectivos.
“Ya contamos con aproximadamente 380 cámaras corporales. Y la meta que le hemos pedido a Carabineros es que todos los efectivos de control de orden público al mes de marzo, cuenten con cámaras corporales para poder registrar los procedimientos”, sostuvo Blumel.
