El huracán Zeta, de categoría 1, entró el lunes a tierra cerca del balneario de Tulum y castigaba con fuertes vientos e intensas lluvias la Península de Yucatán, corazón del Caribe mexicano en el sureste del país, que fue golpeada días atrás por el ciclón Delta.
“El centro del huracán Zeta ingresó a tierra a las 22:00 horas tiempo del centro de México, en las inmediaciones de Ciudad Chemuyil, aproximadamente a 25 kilómetros al nor-noreste de Tulum, Quintana Roo”, informó la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en un comunicado.
El ciclón, en lo más bajo de una escala de 5, se desplazaba hacia el noroeste a 20 km/h y mantenía vientos máximos sostenidos de 130 km/h y rachas de hasta 155 km/h, detalló la dependencia.
Aunque las lluvias y vientos más fuertes golpean la zona centro-norte del estado, el impacto se extendería por toda la región.
“Tendrá un impacto en prácticamente todo el estado”, dijo el gobernador del estado de Quintana Roo Carlos Joaquín en un video difundido en redes sociales del gobierno.
Conagua estima que las precipitaciones en la región fluctuarán entre 150 y 250 mm, los vientos estarán entre 120 y 150 km/h y el oleaje alcanzará de 4 a 7 metros de altura.
El instituto prevé que el fenómeno se debilite a medida que se mueva sobre la Península de Yucatán -donde se ubican los populares balnearios de Cancún, Playa del Carmen y Tulum- la noche del lunes y el martes temprano.
Pero posteriormente se fortalecerá, a medida que se desplace sobre las aguas del Golfo de México, según Conagua.
Se espera que Zeta continúe su trayectoria como huracán hasta tocar costas del sureste de Estados Unidos el jueves.
Quintana Roo, donde se localizan los balnearios del Caribe mexicano, declaró la alerta naranja y ordenó la suspensión de las actividades laborales.
Autoridades pidieron que habitantes y turistas se refugien en sus casas o en hoteles. Además, se suspendió el transporte marítimo de carga y de pasajeros en la zona norte del estado. El gobierno también habilitó varios refugios para quienes no se sientan seguros en sus hogares.