Con la buena campaña que está cumpliendo con Universidad de Concepción, no es de extrañar que Cristián Muñoz siga sin considerar retirarse del fútbol a sus 41 años.
Es que el portero de los del “campanil” aún no tiene en mente colgar los guantes y señaló que todavía no piensa en el retiro, lo que ya habló con los dirigentes de la “UdeC”, con quienes termina contrato a fin de año.
“¿El retiro? No pienso en eso todavía. Termino contrato a fin de año, pero he sido muy claro con los dirigentes y con mi familia. Seguiré jugando un rato más, porque el físico me está acompañando, me siento muy bien, con muchas ganas. Mi familia me apoya”, sostuvo el “Tigre” a El Mercurio.
“Soy un apasionado del fútbol, me encanta, hago todo para llegar lo mejor posible a cada entrenamiento, no solo a los partidos. Después está el cuidado que he tenido, el profesionalismo. Y pasa a tener importancia el trabajo invisible, el que hago en mi casa: la alimentación y el descanso”, añadió.
Sobre el presente de los penquistas, indicó: “La ilusión era pelear arriba. Queríamos sumar muchos puntos para escapar de la parte baja y si lo lográbamos, rápidamente pelearíamos una copa...pero mantener un buen nivel en un torneo largo, con plantel corto, menos presupuesto, se hace más difícil”.
“El primer objetivo es un torneo internacional. El club lo necesita, estamos muy cerca, y eso ha hecho que trabajemos con tranquilidad, pensando en jugar cada vez mejor, superarnos día a día”, sentenció el formado en Boca Juniors.
Es que el portero de los del “campanil” aún no tiene en mente colgar los guantes y señaló que todavía no piensa en el retiro, lo que ya habló con los dirigentes de la “UdeC”, con quienes termina contrato a fin de año.
“¿El retiro? No pienso en eso todavía. Termino contrato a fin de año, pero he sido muy claro con los dirigentes y con mi familia. Seguiré jugando un rato más, porque el físico me está acompañando, me siento muy bien, con muchas ganas. Mi familia me apoya”, sostuvo el “Tigre” a El Mercurio.
“Soy un apasionado del fútbol, me encanta, hago todo para llegar lo mejor posible a cada entrenamiento, no solo a los partidos. Después está el cuidado que he tenido, el profesionalismo. Y pasa a tener importancia el trabajo invisible, el que hago en mi casa: la alimentación y el descanso”, añadió.
Sobre el presente de los penquistas, indicó: “La ilusión era pelear arriba. Queríamos sumar muchos puntos para escapar de la parte baja y si lo lográbamos, rápidamente pelearíamos una copa...pero mantener un buen nivel en un torneo largo, con plantel corto, menos presupuesto, se hace más difícil”.
“El primer objetivo es un torneo internacional. El club lo necesita, estamos muy cerca, y eso ha hecho que trabajemos con tranquilidad, pensando en jugar cada vez mejor, superarnos día a día”, sentenció el formado en Boca Juniors.