El Tribunal Oral Penal de Temuco condenó a Edison Alejandro Cid Contreras a la pena de presidio perpetuo calificado, como autor de cuatro delitos de robo con violación cometidos en diciembre de 2017 y enero de 2018, en el sector de Isla Cautín de la ciudad.
Además, en fallo unánime, el tribunal –integrado por los magistrados José Ignacio Rau Atria (presidente), Rocío Pinilla Dabbadie y Adriana Knopel Jaramillo (redactora)– sentenció a Cid Contreras a 10 años y un día de presidio, como autor de dos delitos de robo con intimidación, y a 8 años de presidio como autor de dos delitos de abuso sexual.
El presidio perpetuo calificado significa que Cid Contreras deberá pasar un mínimo de 40 años tras las rejas. Con las otras penas, sumará un total de 58 años de presidio.
Tras el juicio, el fiscal Cristian Gacitúa señaló estar conforme con la condena y detalló que “este resultado no habría sido posible si no hubiésemos contado con la participación efectiva de las víctimas, tanto en la investigación como posteriormente en el transcurso y en el desarrollo del juicio”.
Explicó que “de las 6 víctimas, 4 eran menores de edad a la época de los hechos, de manera que también fue importante la participación no solo de ellos, sino que de sus familiares que también se vieron involucrados en el proceso de investigación”.
Además, en fallo unánime, el tribunal –integrado por los magistrados José Ignacio Rau Atria (presidente), Rocío Pinilla Dabbadie y Adriana Knopel Jaramillo (redactora)– sentenció a Cid Contreras a 10 años y un día de presidio, como autor de dos delitos de robo con intimidación, y a 8 años de presidio como autor de dos delitos de abuso sexual.
El presidio perpetuo calificado significa que Cid Contreras deberá pasar un mínimo de 40 años tras las rejas. Con las otras penas, sumará un total de 58 años de presidio.
Tras el juicio, el fiscal Cristian Gacitúa señaló estar conforme con la condena y detalló que “este resultado no habría sido posible si no hubiésemos contado con la participación efectiva de las víctimas, tanto en la investigación como posteriormente en el transcurso y en el desarrollo del juicio”.
Explicó que “de las 6 víctimas, 4 eran menores de edad a la época de los hechos, de manera que también fue importante la participación no solo de ellos, sino que de sus familiares que también se vieron involucrados en el proceso de investigación”.
