El Teatro Real de Madrid debió cancelar una función luego de que un grupo de espectadores protestara e impidiera su inicio alegando que no había suficiente separación de seguridad entre ellos, aunque la institución garantizó este lunes que cumplió con la normativa.

“El Teatro Real ha respetado la normativa de seguridad sanitaria de la Comunidad de Madrid, incluso la ha reforzado”, afirmó este lunes en rueda de prensa el presidente del patronato que gobierna la institución, Gregorio Marañón.

En videos compartidos en redes sociales, se puede ver como en la función de la noche del domingo un grupo de personas en la parte superior del teatro aplaude sin cesar y grita “suspensión”, incluso cuando los artistas intentan comenzar a representar la ópera, “Un ballo in maschera”, de Giuseppe Verdi.

En los videos se puede apreciar como a diferencia del patio de butacas, donde hay asientos vacíos entre pequeños grupos de personas, en la parte superior están prácticamente ocupados todos los asientos, que son de menor precio.

“La protesta se ha prolongado pese a los avisos de megafonía que ofrecían a los espectadores la posibilidad de recolocarles o devolverles el importe de las entradas”, explicó el Teatro Real en un comunicado.

Como el “reducidísimo grupo insistió en proseguir con sus protestas para boicotear la representación (…) la misma tuvo que suspenderse”, prosiguió.

Marañón aseguró que en la función del domingo estaba ocupado solo el 51,5% del aforo total de la sala, muy por debajo del 75% que establece la normativa de la región de Madrid para teatros ante la pandemia del covid-19.

Además, afirmó que dicha normativa no exige dejar un asiento libre entre asistentes, sino que establece que se debe dejar un espacio de 1,5 metros entre las personas o en su defecto portar mascarilla, y esta última es obligatoria en todas las funciones del teatro.

De todas maneras, Marañón agregó que el teatro, una de las instituciones culturales más importantes de España, que en 2018 celebró su bicentenario, estudia “qué medidas podemos tomar pensando en esos espectadores que (…) se sentían claramente en una situación no confortable”.