El gobierno de Argentina anunció este viernes un acuerdo con supermercados y proveedores de bienes de consumo masivo para mantener fijos o con alzas reguladas los valores de más de mil 700 productos.
Dicha medida en un intento por contener una inflación que podría llegar a 100 por ciento este año. La decisión ocurre en medio de una compleja situación financiera, con bajas reservas internacionales y un elevado déficit.
El anuncio del gobierno busca que la medida contenga la merma en el poder adquisitivo de los argentinos, muchos de los cuales han caído en el último año en la pobreza.
“Hay un compromiso de todas estas compañías de que en los próximos cuatro meses, en el resto de los 30 mil productos que producen, no pueden aumentar más de 4 por ciento”, explicó el ministro de Economía, Sergio Massa, al anunciar el plan publicado este viernes en el boletín oficial.
“El objetivo de este programa es darles tranquilidad (a los argentinos). Que cuando vayan al supermercado sepan cuánto valen las cosas”, señaló la autoridad.
El convenio entre el gobierno y las empresas de bienes de consumo masivo abarca los rubros de alimentos, bebidas, lácteos, higiene personal y limpieza.
