“No hemos declarado la guerra a Corea del Norte y francamente la sugerencia es absurda”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders.
El jefe de la diplomacia norcoreana, Ri Yong-Ho, acusó más temprano a Trump de “declarar la guerra” a su país y advirtió que derribará a los bombarderos estadounidenses que se acerquen a sus costas, aumentando aún más la tensión sobre el programa de armas nucleares de Pyongyang que Washington busca frenar.
Estados Unidos y Corea del Norte han estado intercambiando insultos y amenazas desde hace una semana, cuando el mandatario estadounidense advirtió en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas que iba a “destruir totalmente” a Corea del Norte en caso de un ataque.
Sanders también rechazó la sugerencia de Ri de que Pyongyang tiene derecho de derribar aviones estadounidenses cerca del espacio aéreo norcoreano.
“Nunca es apropiado que un país derribe aviones de otro país cuando están sobre aguas internacionales”, dijo.
Aún no hay reacciones ni del mismo Trump así como tampoco del Vicepresidente, Mike Pence, ni del Secretario de Estado, Rex Tillerson.