El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo este jueves que la decisión de Francia de reconocer al Estado palestino “recompensa el terror” y supone un riesgo existencial para Israel.
La clase política israelí respondió con contundencia al anuncio de Emmanuel Macron, que alinea a la segunda economía de la UE con países como España, Irlanda, Noruega y Eslovenia, que hicieron lo mismo en 2024, un gesto que Netanyahu advirtió podría “crear otro aliado de Irán, tal como se convirtió Gaza”.
El ministro de Relaciones Exteriores, Gideon Saar, coincidió en que un “Estado palestino será un Estado de Hamás”, en alusión al movimiento islamista que controla Gaza y cuyo ataque del 7 de octubre de 2023 desencadenó la guerra en el enclave.
El vice primer ministro, Yariv Levin, sostuvo que la “vergonzosa decisión” de Francia deja claro que “ha llegado el momento de aplicar la soberanía israelí” en Cisjordania, territorio ocupado por Israel desde 1967, idea reforzada por el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, quien afirmó que el anuncio galo da “un motivo adicional” para anexionar Cisjordania y “acabar de una vez con la peligrosa ilusión de un Estado palestino terrorista”.
El Parlamento israelí, por su parte, aprobó este miércoles una resolución no vinculante que insta al Gobierno a imponer su soberanía sobre Cisjordania, una antigua reivindicación de la extrema derecha.
La oposición también criticó duramente la medida: el ex primer ministro Naftali Bennett la calificó de “señal del hundimiento moral”, mientras que Avigdor Lieberman, líder de Yisrael Beitenu, advirtió que “reconocer un Estado palestino equivale a premiar al terrorismo y a alentar a Hamás”.
Según un recuento de AFP a partir de datos oficiales israelíes, el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 dejó 1.219 muertos, y la campaña militar israelí contra Gaza ha cobrado hasta ahora la vida de 59.587 palestinos, según el Ministerio de Salud del territorio gobernado por Hamás.
