Una denuncia presentada por particulares ante Sernapesca a fines del mes pasado, reportó que una ballena jorobada había sido encontrada muerta cerca de un centro de engorda de salmones inactivo, situado dentro del Parque Nacional Laguna San Rafael, en la región de Aysén.
Tras el hallazgo, el Ministerio del Medio Ambiente interpuso una denuncia ante la Fiscalía para que se investiguen los hechos y se determine si hubo delitos involucrados, recogió Radio Biobío.
El objetivo es establecer las posibles responsabilidades conforme a la Ley de Protección de Cetáceos, la Ley de Pesca y Acuicultura, además de otras normativas legales aplicables.
En este contexto, el Ministerio Público instruyó a la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), específicamente a la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medioambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) de Aysén, para realizar las diligencias necesarias y las pericias pertinentes en el caso.
El comisario Rachid Venegas, de la Bidema Aysén, informó que esta semana el equipo se trasladó a los fiordos donde se registró el deceso de un cetáceo, identificado como una ballena de la especie jorobada.
El trabajo pericial incluyó la fijación planimétrica y fotográfica de la ubicación y estado final del cuerpo de la ballena.
“Además, se realizó una inspección submarina con un robot para identificar si existía algún arte de pesca o dispositivo que pudiera haber causado daño a este mamífero, lo cual, eventualmente, habría derivado en su muerte”, señaló Venegas.
Las siguientes diligencias contemplan entrevistas a testigos, análisis de imágenes captadas por cámaras de vigilancia y recolección de muestras biológicas que permitan esclarecer las causas de la muerte de esta ballena. Los antecedentes obtenidos serán remitidos al Ministerio Público, dado que se trata de una especie protegida.