Integrantes del partido político Ciudadanos Somos Todos presentaron ayer su renuncia ante el Servicio Electoral (Servel) a la colectividad, la cual fue fundada, entre otros, por el ex ministro de Hacienda y ex precandidato presidencial Andrés Velasco.
Las decisiones se concretaron luego de vivir intensas dos semanas de críticas públicas y cruzadas después de las elecciones internas de esa colectividad, que se realizaron el 17 y 18 de agosto. Los últimos 4 en tomar la decisión fueron Juan José Santa Cruz, Ricardo Escobar, Sebastián Sichel, Paola Assael y Patricio Arrau.
“Tarde nos dimos cuenta de que Andrés Velasco no es confiable. Mientras le fuimos útiles a su proyecto político personal, cuando lo apoyamos en el caso Penta, cuando le destinamos tiempo y recursos, no tenía problema, pero el día que pensamos distinto, fuimos traidores y fachos”, dice Jorge Errázuriz, otro que dimitió.
En esa contienda se enfrentaron Juan José Santa Cruz e Ignacia Gómez -de la lista de Velasco- y que terminó con acusaciones de “fraude” por parte de la abogada. Los resultados hasta hoy no se conocen, pues Velasco y su equipo se han negado a abrir la urna hasta que no se eliminen los supuestos sufragios fraudulentos, publica hoy El Mercurio.
La última propuesta la hizo la nómina de Santa Cruz -junto a la tercera lista, de Claudio Quiroz-, que pedía a las personas de los supuestos votos fraudulentos que volvieran a emitir su opción, la que no tuvo acogida.
Con eso, estas quince figuras –Sylvia Eyzaguirre, Ricardo Escobar, Eugenio Evans, Paola Assael, Sebastián Sichel, Juan Ignacio Correa, Patricio Artigoitía, Alejandro Jadresic, Rodrigo Moreno, Viviana Pérez, Jaime Briceño, Esteban Jadresic, Patricio Arrau y Claudia Chávez-, además de Santa Cruz, dieron todo por terminado. Y con duras críticas, sobre todo a Andrés Velasco. En todo caso, algunos de ellos evitaron referirse al ex candidato a senador directamente, como Eyzaguirre, Escobar y Evans.
A estas renuncias se sumaron 80 militantes, número que podría ascender a 200. Además, Rafael Guilisasti -empresario, del grupo fundador, pero sin militancia- también lamenta el quiebre: “Encuentro lamentable el desenlace (…) Una oportunidad perdida, el centro no sale de su atomización”.
Las decisiones se concretaron luego de vivir intensas dos semanas de críticas públicas y cruzadas después de las elecciones internas de esa colectividad, que se realizaron el 17 y 18 de agosto. Los últimos 4 en tomar la decisión fueron Juan José Santa Cruz, Ricardo Escobar, Sebastián Sichel, Paola Assael y Patricio Arrau.
“Tarde nos dimos cuenta de que Andrés Velasco no es confiable. Mientras le fuimos útiles a su proyecto político personal, cuando lo apoyamos en el caso Penta, cuando le destinamos tiempo y recursos, no tenía problema, pero el día que pensamos distinto, fuimos traidores y fachos”, dice Jorge Errázuriz, otro que dimitió.
En esa contienda se enfrentaron Juan José Santa Cruz e Ignacia Gómez -de la lista de Velasco- y que terminó con acusaciones de “fraude” por parte de la abogada. Los resultados hasta hoy no se conocen, pues Velasco y su equipo se han negado a abrir la urna hasta que no se eliminen los supuestos sufragios fraudulentos, publica hoy El Mercurio.
La última propuesta la hizo la nómina de Santa Cruz -junto a la tercera lista, de Claudio Quiroz-, que pedía a las personas de los supuestos votos fraudulentos que volvieran a emitir su opción, la que no tuvo acogida.
Con eso, estas quince figuras –Sylvia Eyzaguirre, Ricardo Escobar, Eugenio Evans, Paola Assael, Sebastián Sichel, Juan Ignacio Correa, Patricio Artigoitía, Alejandro Jadresic, Rodrigo Moreno, Viviana Pérez, Jaime Briceño, Esteban Jadresic, Patricio Arrau y Claudia Chávez-, además de Santa Cruz, dieron todo por terminado. Y con duras críticas, sobre todo a Andrés Velasco. En todo caso, algunos de ellos evitaron referirse al ex candidato a senador directamente, como Eyzaguirre, Escobar y Evans.
A estas renuncias se sumaron 80 militantes, número que podría ascender a 200. Además, Rafael Guilisasti -empresario, del grupo fundador, pero sin militancia- también lamenta el quiebre: “Encuentro lamentable el desenlace (…) Una oportunidad perdida, el centro no sale de su atomización”.
