La Corporación Nacional Forestal (Conaf) autorizó la tala de 96 araucarias milenarias en la región de La Araucanía, como parte de un proyecto vial en la zona.
Mediante las resoluciones N° 594 y 595 emitidas el 18 de julio, permitieron la corta de 39 ejemplares en el tramo Liucura–Icalma, por el mejoramiento de la ruta Ruta R‑95; y 57 en Icalma–Melipeuco, por la terminación y mejoramiento de la ruta S‑61.
Dichas obras buscan pavimentar la ruta con concreto asfáltico, mejorando la conectividad y fomentando el turismo.
No obstante, lo anterior afectará a una especie catalogada como Monumento Natural y clasificada como “en peligro” por el Ministerio del Medio Ambiente e IUCN.
En total, el proyecto contempla la tala directa de 96 ejemplares y la alteración del hábitat de más de 1.700 árboles adicionales.
A modo de compensación, se plantarán 3.648 nuevas araucarias en la Reserva Nacional Alto Biobío, aunque según Austerra Society, algunos expertos advierten que estas medidas no reemplazan el valor ecológico de los ejemplares centenarios, ni su regeneración extremadamente lenta.
Desde un punto de vista legal, la autorización corresponde a una evaluación excepcional bajo el artículo 19 de la Ley 20.283 de Bosque Nativo, que regula la intervención de especies protegidas.
Conaf establece que, a pesar de tratarse de una especie categorizada como “en peligro” por la IUCN y el Ministerio de Medio Ambiente, el impacto no compromete la continuidad de la especie a nivel de cuenca ni país.