El gobierno de Donald Trump estaría gestionando con El Salvador un acuerdo que permitiría a Estados Unidos deportar inmigrantes de terceros países, incluidos presuntos miembros de organizaciones criminales, según informaron funcionarios a CBS News el domingo.
El acuerdo de “Tercer País Seguro” implicaría deportar a inmigrantes de otras naciones a El Salvador, para que puedan solicitar protecciones de asilo desde allí, en lugar de hacerlo desde suelo estadounidense.
El principal objetivo del acuerdo podría ser facilitar al gobierno de Trump la deportación de venezolanos, evitando así la confrontación con el gobierno de Nicolás Maduro, que rechaza dichas repatriaciones.
El plan también incluiría el envío a El Salvador de presuntos integrantes de la banda criminal venezolana Tren de Aragua, que Trump busca designar como “organización terrorista” y ha señalado como responsable de delitos contra estadounidenses durante la campaña electoral de 2024.
Este acuerdo se asemeja a uno negociado entre la Casa Blanca y El Salvador durante el primer mandato de Trump. Sin embargo, nunca se implementó y fue descartado por el gobierno de Joe Biden.
El jueves pasado, Trump realizó una de sus primeras llamadas a un líder internacional, Nayib Bukele, con quien discutió la necesidad de “detener la inmigración ilegal y enfrentar a bandas trasnacionales como el Tren de Aragua”.
La próxima semana, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, iniciará su primera gira internacional, visitando El Salvador y otros tres países de América Latina.