Faloon Larraguibel se sinceró en una reciente entrevista y abordó la decisión de cambiarse de departamento con sus hijos antes de que fuera desalojada, solicitud que realizó su excuñado, Matías Pineda. 

Un receptor judicial llegó al departamento el pasado 10 de abril, pero en ese momento Faloon ya se había ido de la vivienda. Todo esto, debido a que su expareja, Jean Paul Pineda, vendió en el 2021 el departamento a su hermano, y este último quería recuperar la propiedad a través de la justicia.

En una conversación con LUN, la participante de “Palabra de Honor” profundizó en torno a esta situación y reveló una radical decisión que tomó respecto a su vínculo con Pineda. 

“Por suerte, no estábamos ahí (…). Hubiera sido terrible que nos sacaran, porque eso era lo que se buscaba, sacarnos a mí y a mis hijos. Pero por suerte me adelanté”, comenzó diciendo.

Además, mencionó que “me fui antes como una decisión consciente de no exponer a mis hijos. Primero yo estaba en negación, pensaba en que no iba a salir de ahí porque era lo que les correspondía a mis hijos, porque era lo justo”. 

“Pero al final, cuando uno actúa desde la rabia, porque obviamente tenía mucha rabia, podía provocarles daño a otras personas y, en este caso, a mis hijos. No quería que pasaran por algo traumático, algo feo como eso, y nos fuimos antes de que sucediera”, añadió. 

La ex “Yingo”, a la vez, subrayó que actualmente “estamos muy tranquilos, muy felices, con una nueva energía, un nuevo todo. Despertarse en un nuevo lugar es genial. Hay una energía linda, una energía limpia, una buena vibra. Y los niños están felices, la verdad”. 

En cuanto a la demanda de su excuñado por el departamento, y si bien en un principio pensó en defenderse legalmente, confesó que desistió del proceso. “No quiero más guerra. Yo estaba como con toda esa rabia, y todavía la tengo, porque no puede ser que un hombre, después de separarse de la mujer, se olvide de sus hijos, no me cabe en la cabeza. Pero desde el año pasado estoy en una guerra constante y no quiero más conflictos en mi vida”, sostuvo.

“Hay que soltarlo, que haga lo que él quiera, no quiero tener nada con él. Y si eso me va a provocar tener en el tiempo un acercamiento, prefiero dejarlo ir. La vida se va a encargar de todas esas cosas”, expresó. 

Finalmente, acerca de Jean Paul Pineda, remarcó que “no tengo contacto con él y no quiero tenerlo, por lo tanto, no me interesa (el departamento). Y no voy a seguir en esa lucha”. 

“Sí voy a pedir lo que es justo para mis hijos, su pensión de alimentos, si es que pudiera llegar a hacerse cargo de eso. Trabajo tanto para que a mis hijos no les falte nada que no voy a andar mendigándole por ellos. Ya está, la vida se va a encargar”, concluyó.