La tarde de este miércoles se confirmó el regreso sorpresivo a Chile desde Malasia de Fernando Candia, el segundo chileno que está acusado de asesinar a la mujer transexual Yusaini Bin Ishak en Kuala Lumpur, en agosto de 2017.
Tras el incidente, Candia y su acompañante, Felipe Osiadacz, permanecieron privados de libertad por 16 meses en el país asiático, donde tras un largo juicio, a fines de 2018 quedaron con la medida cautelar de libertad vigilada, luego de aceptar la oferta de la Fiscalía de rebajar sus cargos de homicidio a homicidio culposo.
Cuando cumplían dicha medida cautelar, en abril pasado, Felipe Osiadacz se fugó de Malasia y aterrizó sorpresivamente en Chile dejando solo en Malasia a Candia, quien también dejó el país asiático para llegar inesperadamente al país.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile confirmó el viernes 19 de abril que Felipe Osiadacz había vuelto al país pese a permanecer bajo la medida de libertad vigilada en la nación asiática.
El joven recordó que pasó dos años en Malasia a disposición de la justicia de ese país “y cumplí íntegramente la sentencia de pena efectiva que dictaminó el juez. Desde el primer momento quise que este proceso cerrara de la manera correcta y que se confirmara la decisión del juez a cargo del caso que dictaminó una sentencia de dos años”.
Luego de tener el consejo de “importantes abogados malayos e incluso fiscales, asumí que la estrategia de la fiscalía era alargar indefinidamente el caso. Frente a esta injusticia y a la casi segura detención que sufriría decidí junto a mi familia volver a mi país”.
“Este ha sido un proceso doloroso, angustiante y desgastante que tuvo un enorme costo emocional físico y económico tanto para mí como para mi familia y amigos. Quisiera agradecerles a ellos el siempre incondicional apoyo, especialmente a mi madre”, sostuvo.
Según remarcó, “en los momentos más difíciles siempre sentí la preocupación de miles de chilenos. Hoy desde la Municipalidad de La Florida, que nos ha dado su permanente respaldo, quiero responder a ese cariño dando la cara, explicando esta difícil situación. Así espero que termine definitivamente la pesadilla que yo y mi familia hemos sufrido”.
“Otra cosa que les quiero pedir es que no condenen a Felipe, mi amigo y compañero, porque solo nosotros sabemos lo difícil y doloroso que ha sido esto”, indicó.
Candia finalizó citando las palabras del juez que dictaminó la sentencia: “Estuvimos en el lugar, hora y momento equivocado”.
Tras el incidente, Candia y su acompañante, Felipe Osiadacz, permanecieron privados de libertad por 16 meses en el país asiático, donde tras un largo juicio, a fines de 2018 quedaron con la medida cautelar de libertad vigilada, luego de aceptar la oferta de la Fiscalía de rebajar sus cargos de homicidio a homicidio culposo.
Cuando cumplían dicha medida cautelar, en abril pasado, Felipe Osiadacz se fugó de Malasia y aterrizó sorpresivamente en Chile dejando solo en Malasia a Candia, quien también dejó el país asiático para llegar inesperadamente al país.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile confirmó el viernes 19 de abril que Felipe Osiadacz había vuelto al país pese a permanecer bajo la medida de libertad vigilada en la nación asiática.
“CUMPLÍ INTEGRAMENTE LA PENA EFECTIVA”
Cerca de las 17 horas de este miércoles, Fernando Candia leyó una declaración pública en la Municipalidad de La Florida, acompañado del alcalde de esa comuna, Rodolfo Carter.El joven recordó que pasó dos años en Malasia a disposición de la justicia de ese país “y cumplí íntegramente la sentencia de pena efectiva que dictaminó el juez. Desde el primer momento quise que este proceso cerrara de la manera correcta y que se confirmara la decisión del juez a cargo del caso que dictaminó una sentencia de dos años”.
Luego de tener el consejo de “importantes abogados malayos e incluso fiscales, asumí que la estrategia de la fiscalía era alargar indefinidamente el caso. Frente a esta injusticia y a la casi segura detención que sufriría decidí junto a mi familia volver a mi país”.
“Este ha sido un proceso doloroso, angustiante y desgastante que tuvo un enorme costo emocional físico y económico tanto para mí como para mi familia y amigos. Quisiera agradecerles a ellos el siempre incondicional apoyo, especialmente a mi madre”, sostuvo.
Según remarcó, “en los momentos más difíciles siempre sentí la preocupación de miles de chilenos. Hoy desde la Municipalidad de La Florida, que nos ha dado su permanente respaldo, quiero responder a ese cariño dando la cara, explicando esta difícil situación. Así espero que termine definitivamente la pesadilla que yo y mi familia hemos sufrido”.
“Otra cosa que les quiero pedir es que no condenen a Felipe, mi amigo y compañero, porque solo nosotros sabemos lo difícil y doloroso que ha sido esto”, indicó.
Candia finalizó citando las palabras del juez que dictaminó la sentencia: “Estuvimos en el lugar, hora y momento equivocado”.