El ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, en compañía de la delegada presidencial de la Región del Biobío, Daniela Dresdner y el jefe de Defensa Nacional de la región, contraalmirante Jorge Keitel, realizaron un balance tras la primera noche de implementación del toque de queda por incendios forestales en tres regiones, Ñuble, Biobío y La Araucanía.

Veintiocho comunas estuvieron bajo la medida entre las 0 horas y las 5 de la mañana de este viernes.

El secretario de Estado agradeció a Carabineros, por facilitar a 120 efectivos que se encuentran en su última etapa de formación para que se unan a las labores de atención temprana en las comunas más afectadas, entre las que se cuentan la limpieza de terrenos o la creación de cortafuegos.

Junto a la Empresa de Servicios Sanitarios del Biobío (Essbio), el ministro García comunicó de que se hará entrega de estanques de agua en zonas rurales, reponiendo también arranques de agua en las casas que hayan sido afectadas por incendios, condonaciones de deudas y familias damnificadas, pero donde el fuego haya sido extinguido.

“El balance (sobre el toque de queda) ha sido muy positivo, ha sido muy bien recibido por la ciudadanía”, comentó García al ser consultado al respecto.

“Seguimos sumando refuerzos, 58 brigadistas ecuatorianos, se están sumando 100 infantes de Marina nacionales, y próximamente llegarán 150 brigadistas portugueses. No estamos decayendo en la atención del incendio, que sabemos se ha extendido por más de una semana, pero sabemos que es necesario reforzarlo para poder a las famlias para cuidar la vivienda y la vida de las personas que es lo más importante”, señaló el el titular del MOP.