El Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, estuvo en la sede de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos el lunes, cuando inició una visita oficial a Washington.
La rara visita de un mandatario extranjero al servicio de espionaje estadounidense fue informada por su hijo Eduardo Bolsonaro, un diputado federal que lo acompaña en el viaje.
“Ahora voy con el presidente y los ministros a la CIA, una de las agencias de inteligencia más respetadas del mundo”, dijo el legislador en Twitter.
“Será una excelente oportunidad para discutir temas regionales con expertos y técnicos de primer nivel”, añadió.
Una fuente brasileña dijo que Bolsonaro fue a la CIA para discutir sobre crimen organizado y narcotráfico, así como otros temas importantes para los cuerpos de seguridad brasileños, pero no pudo confirmar si se reunió con la directora de la institución, Gina Haspel.
La CIA se negó por su parte a confirmar o negar la visita, diciendo que no comenta sobre quién va a su sede en el suburbio boscoso de McLean (Virginia), en las afueras de Washington DC.
El mandatario de extrema derecha, un exmilitar que asumió el cargo el 1 de enero, viajó a Estados Unidos para reunirse con el presidente Donald Trump con el objetivo de afianzar la afinidad conservadora de corte populista que ambos comparten y coordinar la presión sobre Venezuela para la salida de Nicolás Maduro.
Bolsonaro llegó el domingo con seis ministros, entre ellos el canciller Ernesto Araújo, el ministro de Economía, Paulo Guedes, y el ministro de Justicia, Sergio Moro.
El mandatario fue agasajado en una cena en la embajada de Brasil en Washington, a la que asistieron figuras del ámbito conservador de los dos países, entre ellas el escritor Olavo De Carvalho, considerado el “gurú” de la derecha brasileña, y Steve Bannon, el ultraderechista exasesor de Trump.
