Las autoridades de Japón levantaron este miércoles la alerta por riesgo de tsunami en todo su litoral del Pacífico que se había activado tras el terremoto de 8,8 frente a las costas de Kamchatka (Rusia), aunque siguen aconsejando cautela entre la población.
La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) rebajó la alerta a “aviso por riesgo de tsunami” en la zona costera que va desde Hokkaido (norte del país) hasta Kyushu, la mayor isla suroccidental del archipiélago, tras el citado sismo.
La JMA, sin embargo, recomendó mantener la precaución y alejarse de las áreas costeras mientras permanezcan vigentes estas advertencias.
Las alertas por riesgo de tsunami de hasta tres metros de altura motivaron órdenes de evacuación que involucraron a cerca de 2 millones de personas, a quienes se urgió a abandonar sus hogares y refugiarse en espacios públicos habilitados.
El tráfico ferroviario y aéreo sufrió graves disrupciones durante toda la jornada, afectando por ejemplo al área metropolitana de Tokio y al aeropuerto de Sendai, donde muchos vuelos fueron cancelados o desviados.
Expertos de la JMA instaron a quienes habitan en zonas costeras, ribereñas u otras áreas de riesgo a trasladarse a terrenos elevados, edificios de evacuación u otros lugares seguros, ante la posibilidad de que los tsunamis continúen en las próximas horas.
“Esperamos que las olas de tsunami continúen siendo altas al menos durante un día”, dijo Masashi Kiyomoto, de la JMA, durante una rueda de prensa.
El experto explicó que un solo tsunami puede presentar ciclos de hasta una hora y prolongarse “durante bastante tiempo”, y recordó que en la zona afectada han ocurrido grandes terremotos en el pasado cuyos tsunamis peligrosos se han mantenido por más de 24 horas según registros históricos.
En las costas niponas se registraron tsunamis de distintas alturas, que alcanzaron 1,3 metros en Iwate (noreste), 80 centímetros en Hokkaido (norte) y 30 cm en Yokohama (sur de Tokio).
Los expertos también señalaron que el terremoto de Kamchatka de este miércoles es el más potente en esa región desde 1952, cuando un sismo de magnitud 9 causó la muerte de 2.300 personas y generó un tsunami de más de 10 metros que llegó hasta Alaska y Hawaii.