La polémica está instalada en el Olympique de Marsella, luego de que el equipo de Alexis Sánchez emplazara directamente a la Ligue 1 por una serie de acciones con las que se han sentido perjudicados por el arbitraje, donde el gol anulado el pasado fin de semana al “Niño Maravilla”, fue la gota que rebalsó el vaso. 

En el partido disputado el sábado pasado, el cuadro olímpico cayó 2 a 1 en un importante partido ante Lens, en donde en un principio, el jugador chileno había anotado un gol que significaba la apertura de la cuenta, pero que el árbitro terminó anulando por una supuesta falta.

En un duro comunicado, el conjunto galo partió expresando que “el Olympique de Marseille siempre desea mantener un enfoque muy constructivo frente a las autoridades y todos los protagonistas del fútbol francés”.

“Sin embargo, nos vemos obligados a reaccionar, ya que el club se enfrenta a una gran cantidad de decisiones polémicas que ya tienen un gran impacto en el transcurso de su temporada”, añadieron.

Posteriormente, comenzaron a detallar una serie de acciones que sienten que los han perjudicado en su lucha por el campeonato, como un penal no cobrado sobre Sead Kolasinac frente el Mónaco, una mano dentro del área que no fue cobrada ante el PSG o una cuestionable expulsión de Leonardo Balerdi ante el Estrasburgo.

En la misma línea, agregaron que “teniendo en cuenta lo que está en juego y el impacto de estas decisiones, el Olympique de Marseille pide más respeto y más coherencia en la toma de decisiones futuras para garantizar la equidad de las competiciones, suponiendo que este principio fundamental aún no se pueda preservar”.

De esta forma, habrá que esperar si desde las altas esferas de la Ligue 1 reaccionan al comunicado de los focenses, que por su parte, luego de la derrota del sábado, se ubican en la tercera posición de la liga francesa con 70 puntos, a 8 y 2 unidades respectivamente del líder PSG y el Lens.