En entrevista con El Mercurio, el parlamentario llamó a la cautela: “Hay un dicho que dice ‘vamos con calma que llevamos prisa’. Si nos apresuramos en tratar de pasar muchas reformas a la vez, ninguna de ellas nos va a quedar bien. Es mejor hacer buenas reformas, aunque sean pocas, que hacer muchas que no salgan tan bien”, manifestó.
“Primero deberíamos pasar la reforma tributaria y después nos podemos abocar a la reforma de pensiones. Tener esas dos discusiones en paralelo va a confundir a la gente y va a hacer que ninguna de las dos reformas alcance la calidad que necesitan alcanzar”, remarcó Ossandón.
En ese sentido, reiteró sus críticas a la anterior administración: “Si lo hacemos bien, podemos tener una reforma tributaria que nos dure al menos 10 años. Insisto: Si lo hacemos todo apurado y desordenado, haremos una reforma que tendrá que ser corregida en un próximo gobierno. Eso es lo que pasó con las reformas de Michelle Bachelet”.
El parlamentario también habló de cómo ha visto los seis primeros meses del gobierno: “Yo soy perfeccionista. Siempre me gustaría que las cosas fueran mejores. Pero cuando me pongo demasiado crítico, me acuerdo que hace un año la Nueva Mayoría estaba en el gobierno. Ahí respiro aliviado”.