El Presidente de la República, Sebastián Piñera, intervino en el funeral de la subinspectora Valeria Vivanco Caru, funcionaria de la Policía de Investigaciones que fue baleada el pasado domingo en un operativo desarrollado en la comuna de La Pintana.

Si bien no hizo referencia a peticiones de justicia por el fallecimiento de la efectivo policial, Piñera sí hizo un sentido discurso dirigido a la familia de la detective, señalando que “su familia en este mundo la siente, la llora y la extraña, y con mucha razón. Cuesta comprender por qué Dios llama a las mejores en forma tan temprana”, además de destacar el cumplimiento del deber por parte de la malograda policía.

“Ella entregó su vida cumpliendo con su juramento, entregó su vida para proteger la de los demás y no hay muestra más grande de amor que lo que hizo”, agregó, señalando que “cuando uno reflexiona, se da cuenta de que Valeria refleja el espíritu de PDI y Carabineros que muchas veces y todos los días arriesgan sus vidas para proteger las de los demás, a veces de forma muy incomprendida, una tarea sacrificada y abnegada”.

Asimismo, el Mandatario tuvo palabras para quienes son los responsables de la muerte de la funcionaria de la policía civil, señalando que “cuesta comprender cómo puede haber tanta maldad para en forma tan cobarde, provocar tanto daño como los que la asesinaron”, e indicando que “una buena forma de hacer un homenaje a su vocación es preocupándonos de cumplir su legado, su juramento”.

Además, de ello, el Presidente aprovechó la ocasión para pedir una vez más una reforma a la legislación respecto al control de armas y a la protección del personal policial que se ve en peligro en operativos de esta naturaleza.

“Ojalá tengamos mejores leyes. Cómo echamos de menos una buena ley de control de armas, o un estatuto de protección a las policías. Por eso yo quisiera decir a su familia, que si bien sienten un dolor lacerante, también sienten un profundo orgullo y que ojalá sea eso, lo que les dé esperanzas”, cerró Piñera.