La iniciativa tiene que ver con que el único imputado por la desaparición y muerte de tres jóvenes de Atacama ya había sido condenado a 24 años de presidio por dos robos con violación en 2005, no obstante en 2019 habría reincidido luego de acceder al beneficio carcelario de libertad.
Prohens afirmó que “entiendo a la comunidad copiapina cuando no concibe que un agresor sexual esté libre o tenga este permiso para reducir su condena”. A su juicio “esto se podría corregir incluyendo como un nuevo requisito un peritaje clínico forense, que debiera realizar necesariamente un psiquiatra”.
Precisó que “dicho peritaje podría dar cuenta de rasgos de psicopatía, para inferir con mayor precisión si la persona está apta o no para reinsertarse a la sociedad.”
Tras revisar la ley de Libertad Condicional, y a pesar de que ésta fue recientemente modificada, no se incluyó la obligatoriedad de un peritaje psiquiátrico para los condenados por delitos sexuales, lo que, a juicio del parlamentario, “resulta una debilidad de la norma, ya que la comisión de estos delitos va frecuentemente asociada a rasgos psicopáticos”.
Prohens señaló “es de vital importancia que se realice un informe psicosocial y un peritaje psiquiátrico forense para que, en base a un diagnóstico clínico que incluya información sobre el deterioro funcional de la persona y cómo éste afecta sus capacidades particulares, la Comisión de Libertad Condicional cuente con todos los antecedentes necesarios para adquirir la convicción de la reinserción en la sociedad”.
Recalcó que “no se puede entregar libertad a un delincuente que pueda reincidir en un delito tan brutal como lo fueron los casos que se conocieron en nuestra ciudad de Copiapó”.
Castración química
Respecto a recurrir a la castración química como un método legítimo, el parlamentario señaló que las personas que la critican lo hacen en base a que ésta no resolvería la agresividad o la necesidad de poder.Al respecto, dijo que “si bien lo anterior puede resultar verdadero, lo cierto es que en los países donde es utilizada se ha reducido la tasa de reincidencia, que es hacia donde queremos apuntar. ¡Que nunca más nos enteremos que mujeres inocentes mueren por culpa de un sistema penal deficiente!”.