Nicolás Jarry (204° del ranking ATP) hizo historia para el tenis chileno. La segunda raqueta nacional derrotó este jueves al estadounidense Reilly Opelka (157°) por la tercera y última ronda de las clasificaciones de Roland Garros y puso fin a una sequía de seis años sin nacionales en singles de un Grand Slam.
La tarea del “Príncipe” no era sencilla en el Major parisino, pues al frente tenía a un “gigante” norteamericano, de 19 años y 2,11 metros de estatura, que basa su juego en potentes saques, al igual que el criollo, y que venía jugando muy bien en arcilla. Por eso se esperaba un estrecho duelo de cañoneros en el Court 14.
En la primera manga, ambos jugadores estuvieron firmes con sus servicios, por lo que todo se tuvo que definir en un tie-break. En esa instancia, el nieto de Jaime Fillol estuvo más certero y se lo adjudicó por un 7-4.
Parecía que con el primer parcial en el bolsillo el nacional tomaba un envión anímico, pues de entrada en el segundo tuvo cuatro posibilidades de quiebre, pero no lo aprovechó y eso lo pagó caro. El norteamericano le rompió el saque en el segundo game, lo cual le bastó para después llevarse el capítulo por 6-3.
Sin embargo, el criollo no bajó los brazos y en el segundo juego del set final pudo quedarse por primera vez con el servicio de Opelka para sellar todo por 7-6 (4), 3-6 y 6-3 en una hora y 49 minutos de partido, con 13 aces contra 14 de su rival.
Con esto, Jarry será por primera vez en su incipiente carrera uno de los 128 mosqueteros en el cuadro principal de Roland Garros, recibirá poco más de 26 millones de pesos por participar en el main draw y de paso, termina con una maldición de seis años sin chilenos en un Grand Slam, donde la última presencia fue la de Fernando González en el US Open del 2011.
La tarea del “Príncipe” no era sencilla en el Major parisino, pues al frente tenía a un “gigante” norteamericano, de 19 años y 2,11 metros de estatura, que basa su juego en potentes saques, al igual que el criollo, y que venía jugando muy bien en arcilla. Por eso se esperaba un estrecho duelo de cañoneros en el Court 14.
En la primera manga, ambos jugadores estuvieron firmes con sus servicios, por lo que todo se tuvo que definir en un tie-break. En esa instancia, el nieto de Jaime Fillol estuvo más certero y se lo adjudicó por un 7-4.
Parecía que con el primer parcial en el bolsillo el nacional tomaba un envión anímico, pues de entrada en el segundo tuvo cuatro posibilidades de quiebre, pero no lo aprovechó y eso lo pagó caro. El norteamericano le rompió el saque en el segundo game, lo cual le bastó para después llevarse el capítulo por 6-3.
Sin embargo, el criollo no bajó los brazos y en el segundo juego del set final pudo quedarse por primera vez con el servicio de Opelka para sellar todo por 7-6 (4), 3-6 y 6-3 en una hora y 49 minutos de partido, con 13 aces contra 14 de su rival.
Con esto, Jarry será por primera vez en su incipiente carrera uno de los 128 mosqueteros en el cuadro principal de Roland Garros, recibirá poco más de 26 millones de pesos por participar en el main draw y de paso, termina con una maldición de seis años sin chilenos en un Grand Slam, donde la última presencia fue la de Fernando González en el US Open del 2011.
