Una íntima reflexión realizó este miércoles Pamela Leiva, quien durante la reciente edición de “El Medio Día” (TVN), se sinceró en torno a la cirugía bariátrica a la que se sometió hace 17 años.
En dicho espacio televisivo, la comediante manifestó que “es un camino que no ha sido fácil, con altos y bajas, la cirugía bariátrica me cambió la vida. Más allá del fin de una enfermedad, fue el comienzo de una etapa nueva”.
“La cirugía bariátrica viene a ayudar a una baja de peso importante, pero la verdad es que la obesidad es una enfermedad crónica, yo sufro de una adicción a la comida”, expresó.
La exparticipante de “1810” planteó que el apoyo psicológico que ha recibido le ha ayudado a mantener su peso, y a la vez, mencionó que “pasaba mucho que la obesidad es una enfermedad social, donde uno recibe maltratos de los mismos equipos médicos. Yo lo viví y es muy frustrante, hoy en día existen guías clínicas de protocolos de los doctores hacia los pacientes”.
“Me acuerdo que una vez le dijeron a mi mamá que la única forma de que dejara de comer es que se siente al frente de ella con dos pesos y cada vez que ella agarre un pan, usted le pegue. Eso es muy frustrante”, sostuvo, agregando que “después de eso cada vez subía más de peso, llegué a pesar cerca de 130 kg en 1,55 mts”.
La humorista indicó que, producto de la cirugía, “tengo que estar inyectándome vitaminas, preocupándome de absorber B12 o por ejemplo, el reflujo. Hay mucho efecto secundario, pero son muchos más los beneficios”.
“Yo me operé a los 26 años, tenía resistencia a la insulina, tenía ovario poliquístico y con los primeros 20 kilos que bajé, todas esas enfermedades desaparecieron. Uno escucha muchas veces a gente joven que tiene la enfermedad que dice que está sano, eso depende de la edad”, subrayó
Además, señaló que “ha sido un trabajo largo, son 17 años, tengo altos y bajos, muchos cuestionamientos. Siempre está el temor de volver. Cada cierto tiempo me llevo al pasado para no volver. Llegar a una obesidad mórbida fue perder el control de mi vida”.
“La clave de mantener un peso saludable es una mesa de tres patas: cabeza sana, alimentación y deporte. Si cualquiera de estas cosas no está, esta mesa se cae”, sentenció
