“Nuestra representada no estaba en obligación de permanecer en cuarentena, por no constituir un contacto estrecho de un caso confirmado de Covid-19”, señala el escrito que la defensa de la suspendida seremi de salud, Katia Guzmán, presentó ante la Corte de Apelaciones de Temuco, en respuesta la acción legal del Colegio de Periodistas de la región por negligencia de la autoridad.
En el documento de 17 carillas, la defensora penal pública Constanza Álamos, expone por qué considera que su representada -quien también fue diagnosticada con la enfermedad- no cometió delito alguno al realizar actividades públicas pese a haber tenido contacto con un funcionario de su repartición que fue diagnosticado con el virus.
Los descargos se refieren al jefe de la Unidad de Residuos del Departamento de Acción Sanitaria, Pablo Cabezas, quien no es un cercano colaborador de Guzmán pero con el que sí la cuestionada autoridad sostuvo una reunión el pasado 15 de marzo y que “luego de ella no hubo un contacto más estrecho”, informó la Tercera.
El texto presentado ante el tribunal de alzada temuquense, explica que la seremi fue informada el 20 de marzo del diagnóstico positivo de su subordinado y que, por tanto, no tenía cómo saber que era foco de infección del Covid-19, razón por la que continuó con su rutina en plena emergencia sanitaria.
Según el recurso de protección del Colegio de Periodistas de La Araucanía y otros profesionales de la prensa, Cabezas había llegado de sus vacaciones en Brasil y se incorporó a sus funciones habituales sin ser puesto en cuarentena preventiva, tomando en cuenta el riesgo de contagio.
Por ello es que también la denunciaron ante el Ministerio Público, que ya realiza la indagatoria de los hechos a cargo del fiscal de Villarrica, Carlos Hoffman, respecto del eventual delito que se le imputa de violar el artículo 318 del Código Penal, esto es, infringir las reglas de salubridad y de higiene que son impartidas por la autoridad, en tiempos de pandemia.
Ello, porque los profesionales la acusan de un presunto comportamiento negligente, argumentando que estando en conocimiento que en había al menos un funcionario de la seremi con coronavirus, Katia Guzmán no activó el protocolo para evitar contagios y siguió participando en conferencias de prensa y reuniones con diversas autoridades del gobierno y del Ejército, para enfrentar la crisis sanitaria.
A raíz de esta situación, el intendente de La Araucanía, Víctor Manoli, y el jefe de la Defensa Nacional de la región, el general Patricio Mericq, además de varios otros seremi de la zona, también dieron positivo en el examen de coronavirus y debieron dejar sus funciones para recuperarse y evitar ser foco de contagio para otras personas.
La suspendida seremi también enfrenta un sumario administrativo destinado a establecer sus responsabilidades en la eventual omisión de información y proceder respecto del la situación.
https://lanacion.cl/2020/04/09/covid-19-seremi-de-salud-de-la-araucania-fue-suspendida-mientras-dure-el-sumario-por-contagio/
https://lanacion.cl/2020/03/22/seremi-de-salud-de-la-araucania-dio-positivo-por-coronavirus/
En el documento de 17 carillas, la defensora penal pública Constanza Álamos, expone por qué considera que su representada -quien también fue diagnosticada con la enfermedad- no cometió delito alguno al realizar actividades públicas pese a haber tenido contacto con un funcionario de su repartición que fue diagnosticado con el virus.
Los descargos se refieren al jefe de la Unidad de Residuos del Departamento de Acción Sanitaria, Pablo Cabezas, quien no es un cercano colaborador de Guzmán pero con el que sí la cuestionada autoridad sostuvo una reunión el pasado 15 de marzo y que “luego de ella no hubo un contacto más estrecho”, informó la Tercera.
El texto presentado ante el tribunal de alzada temuquense, explica que la seremi fue informada el 20 de marzo del diagnóstico positivo de su subordinado y que, por tanto, no tenía cómo saber que era foco de infección del Covid-19, razón por la que continuó con su rutina en plena emergencia sanitaria.
Según el recurso de protección del Colegio de Periodistas de La Araucanía y otros profesionales de la prensa, Cabezas había llegado de sus vacaciones en Brasil y se incorporó a sus funciones habituales sin ser puesto en cuarentena preventiva, tomando en cuenta el riesgo de contagio.
Por ello es que también la denunciaron ante el Ministerio Público, que ya realiza la indagatoria de los hechos a cargo del fiscal de Villarrica, Carlos Hoffman, respecto del eventual delito que se le imputa de violar el artículo 318 del Código Penal, esto es, infringir las reglas de salubridad y de higiene que son impartidas por la autoridad, en tiempos de pandemia.
Ello, porque los profesionales la acusan de un presunto comportamiento negligente, argumentando que estando en conocimiento que en había al menos un funcionario de la seremi con coronavirus, Katia Guzmán no activó el protocolo para evitar contagios y siguió participando en conferencias de prensa y reuniones con diversas autoridades del gobierno y del Ejército, para enfrentar la crisis sanitaria.
A raíz de esta situación, el intendente de La Araucanía, Víctor Manoli, y el jefe de la Defensa Nacional de la región, el general Patricio Mericq, además de varios otros seremi de la zona, también dieron positivo en el examen de coronavirus y debieron dejar sus funciones para recuperarse y evitar ser foco de contagio para otras personas.
La suspendida seremi también enfrenta un sumario administrativo destinado a establecer sus responsabilidades en la eventual omisión de información y proceder respecto del la situación.
https://lanacion.cl/2020/04/09/covid-19-seremi-de-salud-de-la-araucania-fue-suspendida-mientras-dure-el-sumario-por-contagio/
https://lanacion.cl/2020/03/22/seremi-de-salud-de-la-araucania-dio-positivo-por-coronavirus/
