Como una forma de apoyar a los profesionales de la salud que han estado trabajando directamente con pacientes de Covid-19 y así ayudarlos a disminuir los niveles de estrés, ansiedad y depresión por los que pueden estar atravesando, Clínica NovaVita implementará un tratamiento de emergencia de salud mental en el sistema público de salud y que incluirá el uso de bobinas electromagnéticas de estimulación cerebral.
Este tratamiento, que ya cuenta con la aprobación del Comité Científico del Servicio de Salud Metropolitano Central, empleará el uso de esta tecnología que permitirá administrar y dirigir pulsos electromagnéticos a zonas específicas del cerebro que están relacionadas con la sintomatología a tratar, de una forma rápida, segura, ambulatoria y sin efectos secundarios.
“Es un tratamiento altamente efectivo que puede facilitar una mejoría profunda en la salud mental del personal médico, aliviando los síntomas de estrés y depresión, contribuyendo así a una calidad de vida significativamente mejor. Esta técnica administra pulsos electromagnéticos localizados, de forma adyacente al cuero cabelludo del paciente, con el objetivo de normalizar el funcionamiento neuronal, permitiendo remisión o una importante mejoría en los síntomas asociados”, aseguró Paula Muñoz, jefa clínica de NovaVita.
El tratamiento con la técnica Deep TMS que adaptará la clínica NovaVita en algunos centros hospitalarios, incluye 12 sesiones, cada una de 30 de minutos y pretende que los profesionales de la salud puedan someterse a estas evaluaciones para que puedan reducir hasta en un 90% los cuadros de estrés asociados a la emergencia sanitaria. Además, se espera que en estos cuatro meses de trabajo más de 120 trabajadores puedan ingresar a este programa, que cuenta además con apoyo psicológico y control médico siquiátrico.
Muñoz agregó que “queremos que esta experiencia marque un precedente en la implementación de tecnologías para el manejo de crisis, desarrollar espacios I+D en los servicios públicos y con ello, avanzar hacia la convergencia a los niveles de desarrollo de los países de la OCDE respecto a salud mental. Como equipo queremos ampliar cobertura y llegar a más establecimientos de salud, porque sabemos de primera fuente que lo necesitan”.
Según confirman desde Clínica NovaVita, a través esta técnica no invasiva y que está certificada por la FDA, el ISP y el Minsal, en los primeros cincos días los profesionales de la salud ya mostrarán mejoras significativas en su estado anímico y al cabo de la segunda y tercera semanas comenzarán a recuperar la sensación de control de las variables que genera un cuadro intenso de estrés.
De acuerdo con la experiencia internacional, la buena tasa de respuesta a esta tecnología ha permitido que 8 de cada 10 pacientes logren remitir síntomas asociados al estrés, lo que beneficia directamente a mejorar la calidad del sueño, los estados de melancolía y los procesos cognitivos, como la memoria y la concentración.