Un escándalo de espionaje remeció a Alemania en las últimas horas: un ciudadano británico fue detenido y acusado de filtrar información confidencial a los servicios secretos rusos, según lo comunicado este miércoles por la Fiscalía Federal germana.
El individuo, identificado como David S., entregaba los secretos al Kremlin a cambio de dinero, según las evidencias que cumplieron con la petición del juez instructor del Tribunal Supremo. El hombre trabajaba como empleado en la embajada del Reino Unido en Berlín y fue arrestado el martes.
La investigación detalla que el infiltrado venía trabajando con Rusia desde noviembre de 2020 y que “en al menos una ocasión” el acusado pasó documentos obtenidos gracias a su trabajo a un “representante de un servicio secreto ruso”.
“El acusado recibió como contraprestación por su información dinero en efectivo en una cantidad por el momento desconocida“, informaron en un comunicado las autoridades teutonas, quienes recibieron ayuda de los mismos británicos para detener al sujeto.
El detenido pasará este miércoles a disposición judicial para prestar declaración. No es la primera persona que es descubierta por el Gobierno alemán por este tipo de prácticas: se suma a otras dos que en los últimos tres meses fueron arrestadas por realizar espionaje para servicios secretos extranjeros.