El Parlamento de Grecia aprobó este jueves el matrimonio homosexual y la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo, medida que fue impulsada por el gobierno conservador, como una de sus promesas de campaña. 

El proyecto de ley fue aprobado con 176 votos a favor, 76 en contra y 2 abstenciones. Asimismo, según consignó Radio Cooperativa, en ese proceso resultaron clave los votos de diferentes miembros de los partidos de oposición, pues de los 158 diputados de la conservadora Nueva Democracia (ND), el partido del gobierno, muchos votaron en contra, se abstuvieron o salieron de la Cámara.

Además, Grecia se transformó en el país número 20° de Europa y el primero cristiano ortodoxo en legalizar el matrimonio entre parejas del mismo sexo.

El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, quien dio libertad de voto a los diputados de su partido, mantuvo su promesa de campaña, a pesar de las críticas y la oposición que representó la Iglesia ortodoxa.

Incluso, Mitsotakis le pidió en reiteradas ocasiones a la institución religiosa que no interfiera en los asuntos del Estado, y este jueves, en medio del debate parlamentario, citó un pasaje bíblico, al mencionar que “al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”. 

Por su parte, asociaciones pro derechos LGTBI celebraron la aprobación de la ley, aunque algunas de ellas criticaron el hecho de que no se haya autorizado la gestación subrogada para parejas homosexuales, y también cuestionaron la incertidumbre existente respecto a las parejas del mismo sexo para acceder a tratamientos de reproducción asistida. 

No obstante, la profesora de Derecho en la Universidad de Salónica y una de las redactoras de la norma, Lina Papadopulu, explicó a EFE que aunque la información no esté detallada en el texto, “se entiende que los matrimonios de lesbianas sí podrán acceder a técnicas de reproducción asistida”, y en una “aplicación proporcional” de la legislación que hay para las parejas heterosexuales.