La hija de Sarika Rodrik (dueña de la lujosa tienda con su nombre), Nikole Rosenberg, contó cómo fue el día del segundo asalto en menos de una semana, que dejó con millonarias pérdidas el local.
La mujer, en conversación con LUN, contó que intentó espantar a los asaltantes gritándoles “váyanse, váyanse”. También reveló que en el asalto del sábado, su madre salió persiguiendo a los ladrones con un palo.
Actualmente, la tienda estará cerrada hasta nuevo aviso y según declaró Rosenberg a LUN, están pensando en mayores medidas de seguridad: “Vamos a abrir cuando tengamos todas las medidas de seguridad para trabajar en un país como este. Estamos en una jungla”.
“Vamos a volver convertidas en un búnker y con guardias armados. Si nos tenemos que defender lo vamos a hacer, como ocurre en otros países de Sudamérica. Estamos evaluando con empresas de seguridad y asesorándonos con ex policías para tomar la mejor decisión, respetando el marco legal”, agregó.
Para cerrar, la hija de la estilista planteó que debido a la visibilidad del caso “tenemos la responsabilidad social de representarlos (a otras víctimas de la delincuencia) y exigir nuestro derecho a estar en la casa, a caminar por la calle y a trabajar con tranquilidad”.
