No cabe duda de que “Titanic” es una de esas películas que dejó grandes recuerdos en el imaginario de los espectadores. Resulta imposible olvidar la escena en la que “Jack” decide mantenerse en las gélidas aguas tras el naufragio para salvar a su amada “Rose”, quien flota sobre una puerta.
Ahora, dejando de lado la magia del cine, Kate Winslet entregó nuevos detalles sobre la icónica escena del filme de James Cameron. En diálogo con la revista People, la actriz desclasificó que el agua no era tan profunda como se veía en la producción: “Fue un tanque bastante incómodo… porque para reventar la burbuja, estaba a la altura de la cintura en ese momento”.
“Me temo que Leo (DiCaprio) estaba arrodillado, de todos modos, no debería decirlo”, confesó Winslet.
Sin embargo, lo que realmente sorprendió a la intérprete fue que el tanque en cuestión era “infinito; había agua corriendo constantemente y se podía escuchar el sonido constante del agua”.
El estreno de la cinta fue un completo éxito, recaudando más de 2 mil millones de dólares en la taquilla. No obstante, para la protagonista fue una experiencia para el olvido: “Cuando se estrenó en Londres, me sentí muy mal. Tuve una intoxicación alimentaria terrible y estuve hospitalizada en Londres, fue muy extraño. Y luego, cuando se estrenó en Estados Unidos, estaba en el funeral de un novio”.