Durante la jornada de este martes, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, sostuvo su primer encuentro con la directiva de la Central Unitaria de Trabajadores, cita en la que el secretario de Estado resaltó la apertura al diálogo expresada por la CUT, “entendiendo que hay diferencias” existentes entre ambos sectores, además de su importancia como la organización sindical más representativa del país.

Tras la cita, se informó que se elaboró una agenda de trabajo mediante la cual se abordarán los principales temas del mundo laboral, y los desafíos que han ido surgiendo en éste.

“Creemos que la palabra trabajo debe unir a los chilenos y no dividirlos y estamos en todo sentido dispuestos a acoger este espíritu de diálogo y de construir entre todos mejores condiciones laborales para los trabajadores”, declaró.

Además, Monckeberg detalló que en la reunión se hizo un repaso de los temas que serán prioridad para el Gobierno, en materia de agenda laboral, entre éstos la reforma previsional, tras lo cual anuncio que a futuro se sostendrán nuevos encuentros para tratar cada una de estas iniciativas.

“Vamos a construir un acuerdo para hacer un cambio en el sistema previsional”, señaló el secretario de Estado, añadiendo que la meta principal será “subir las pensiones a la clase media, a las familias más vulnerables y es importante ponernos de acuerdo en una reforma previsional que logre su objetivo”.

La presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, indicó que “queremos no sólo conocer la propuesta del Ejecutivo, sino también queremos hacer llegar nuestras propias propuestas”.

SALARIO MÍNIMO E INMIGRACIÓN

En cuanto al salario mínimo, el titular del Trabajo sostuvo que durante el presente año se tendrá que negociar nuevamente, destacando la trascendencia que tendrá el diálogo entre el Gobierno y la CUT.

A su vez, se trató el tema de la inmigración, momento en el que ministro resaltó un estudio ejecutado por la Central, sobre el mercado laboral chileno a partir del alza de extranjeros en el país.

En dicho contexto, afirmó que “no puede haber discriminación y, por lo mismo, sabemos que es prioridad para el Gobierno y así lo ha anunciado el ministro del Interior: modernizar en materia de inmigración la legislación vigente, porque el trabajador que entra a nuestro país sea extranjero o nacional tenga los mismos derechos”.

Igualmente, Figueroa hizo ver la necesidad de cambiar la ley, aseverando que “no puede haber discriminación alguna para que los trabajadores puedan optar a trabajo decente, y eso no tiene solo que ver con las fronteras nacionales, sino que con las plenas garantías y condiciones para que todo aquel que quiera trabajar y generar desarrollo para nuestro país”.