Por primera vez tras la debacle electoral sufrida por el candidato de “La Fuerza de la Mayoría”, Alejandro Guillier, que significó que la Presidenta Michelle Bachelet deba entregar el poder en marzo a Sebastián Piñera, durante este sábado el Partido Socialista tendrá una reunión clave para determinar los ejes que tomará a futuro como parte de la oposición: el Pleno del Comité Central.
El encuentro reune a los actores claves de la colectividad encabezada por el ex ministro Álvaro Elizalde.
El titular partidario se refirió al rol por venir de la tienda, la que será parte de una “oposición inteligente y con amplio entendimiento desde la Democracia Cristiana al Frente Amplio”, dijo, ante sus compañeros de partido.
Se pronostica que en esta oportunidad se produzca un intenso debate en torno a las decisiones que encaminarán al partido durante 2018, como parte de un conglomerado que deberá enfrentar el cambio de mando que se producirá en sólo pocas semanas. Ello no será una tarea sencilla al existir distintos grupos dentro de la colectividad.
En tal sentido, de acuerdo con el diario El Mercurio, parte de la disidencia interna a la actual directiva planteará al Comité Central realizar una profunda “crítica y autocrítica” respecto a lo sucedido en las últimas elecciones presidenciales y parlamentarias, así como también sobre el estado actual del partido.
Así, se abogaría por la necesidad de incluir a los diversos sectores de la tienda con el fin de “abrir lugares y espacios de participación a distintas corrientes del partido en las instancias institucionales”, según señaló Fernando Atria, de “Izquierda Socialista”.
Esta postura se verá contrastada con la de otras facciones, tales como “Colectivo Socialista”, “Nueva Izquierda”, “Tercerismo”, y “Grandes Alamedas”, entre otras.
El encuentro reune a los actores claves de la colectividad encabezada por el ex ministro Álvaro Elizalde.
El titular partidario se refirió al rol por venir de la tienda, la que será parte de una “oposición inteligente y con amplio entendimiento desde la Democracia Cristiana al Frente Amplio”, dijo, ante sus compañeros de partido.
Se pronostica que en esta oportunidad se produzca un intenso debate en torno a las decisiones que encaminarán al partido durante 2018, como parte de un conglomerado que deberá enfrentar el cambio de mando que se producirá en sólo pocas semanas. Ello no será una tarea sencilla al existir distintos grupos dentro de la colectividad.
En tal sentido, de acuerdo con el diario El Mercurio, parte de la disidencia interna a la actual directiva planteará al Comité Central realizar una profunda “crítica y autocrítica” respecto a lo sucedido en las últimas elecciones presidenciales y parlamentarias, así como también sobre el estado actual del partido.
Así, se abogaría por la necesidad de incluir a los diversos sectores de la tienda con el fin de “abrir lugares y espacios de participación a distintas corrientes del partido en las instancias institucionales”, según señaló Fernando Atria, de “Izquierda Socialista”.
Esta postura se verá contrastada con la de otras facciones, tales como “Colectivo Socialista”, “Nueva Izquierda”, “Tercerismo”, y “Grandes Alamedas”, entre otras.
