La Armada anunció el jueves en la noche que dio por terminadas las tareas de rescate de la tripulación, al descartar esperanzas de que estén vivos, pero mantuvo la búsqueda del sumergible, que estaba comandado por el capitán de fragata Pedro Martín Fernández, de 45 años.
Expertos coinciden que no hay más esperanzas de vida en el submarino.
“No entiendo esta decisión de la Armada. Es apurada e infundada. Le exijo al presidente Mauricio Macri que revierta la decisión de abortar el rescate. Los estamos abandonando (a los tripulantes) y yo no me permito quedarme callado”, lanzó Luis Tagliapietra, padre de Damián, un teniente de corbeta de 27 años que navegaba en el San Juan.
Macri no se pronunciado al respecto.
Este viernes ya regresaron al puerto de Comodoro Rivadavia, tres buques que habían sido desplegados sobre el Atlántico para el operativo rescate del que participaron estas dos semanas un total de 28 buques, nueve aeronaves y 4.000 hombres de 18 países.
SECRETO Y DEFENSA
Representadas por Tagliapietra, ocho familias se presentaron como querellantes en la causa que investiga la desaparición del submarino, a cargo de la jueza federal Marta Yáñez de Caleta Olivia, 1.860 km al sur de Buenos Aires.La jueza pidió que se levante el secreto militar. El ministerio de Defensa aún no responde.
Según expertos, el submarino se hundió a unos 450 km de la costa de la Patagonia, unas horas después de haber reportado un ingreso de agua de mar a través del snorkel, que provocó un cortocircuito y un principio de incendio en las baterías, que propulsan la nave equipada de motores diésel.
“La esperanza de vida es nula. Estamos en el medio de una tragedia. El ambiente en la Armada es de consternación absoluta, angustia y dolor. Hemos perdido a 44 camaradas”, dijo a la AFP un oficial de la Marina argentina que pidió anonimato.
¿Queda alguna esperanza de recuperar los cuerpos? ¿Se conocerán las causas de la desaparición del San Juan?
“Ahora sabemos que murieron los 44 marinos. Pero sería otra tragedia que muera la verdad. Y la verdad sólo se puede encontrar si podemos encontrar el submarino y verlo”, declaró a la AFP el ingeniero naval Horacio Tettamanti, presidente de la Asociación Bonaerense de la Industria Naval (ABIN).
El experto presume que en el submarino ocurrió “una cuestión significativa y abrupta que irrumpió de una forma muy violenta y muy rápida”, cuyo efecto se agravó porque se produjo en una zona de más de 200 y 300 metros de profundidad.
Estimó que encontrar al San Juan en las profundidades del Atlántico “es una cuestión de días”.
Estados Unidos y Rusia enviaron a Argentina una tecnología sofisticada, incluyendo pequeños vehículos submarinos a control remoto, capaces de ir a más de 6.000 metros de profundidad.
FAMILIAS CONMOCIONADAS
En la entrada de la base naval de Mar del Plata, 400 km al sur de la capital, algunas madres y esposas no aceptaban este viernes la decisión oficial de suspender la búsqueda de los tripulantes.“¡Qué al menos nos devuelvan los cuerpos, que podamos enterrarlos!”, reaccionó una madre.
“¡Qué los sigan buscando y que los traigan a todos, los esperamos!”, clamó Marcela Moyano, esposa del suboficial primero Hernán Rodríguez, jefe de máquinas del sumergible.
Moyano está convencida de que su esposo y padre de sus dos hijos de 7 y 13 años está con vida.
“En el primer momento nos dijeron (las autoridades) que los iban a buscar, que los iban a traer. Esto es una pesadilla. Los van a abandonar”, acusó.
“Por favor, que no se retiren Estados Unidos y Rusia, que nos apoyen, por favor”, rogó otra familiar sin identificarse.
https://lanacion.cl/2017/12/01/los-6-accidentes-de-submarino-mas-mortiferos-de-los-ultimos-30-anos/