La PDI detuvo a siete sujetos dedicados a la elaboración y distribución de drogas en la zona sur de Santiago. Además, se sospecha que realizaban el lavado de los activos obtenidos del narcotráfico mediante la minería de criptomonedas.

Los antecedentes del caso fueron entregados por el fiscal Carlos Yáñez, de la Fiscalía Metropolitana Sur; el jefe de la Brigada Antinarcóticos Metropolitana Sur, subprefecto Eduardo Gatica, y el jefe de la Brigada del Cibercrimen, prefecto Luis Orelllana.

Se trata de la tercera etapa de la Operación Lucerna, que permitió la captura de tres mujeres y cuatro hombres, que son los proveedores de droga de otros ocho sujetos detenidos en dos operativos anteriores que ya fueron formalizados.

En poder de estos siete imputados, la PDI encontró 36 kilos 151 gramos de distintos tipos de droga como cannabis sativa, éxtasis y ketamina, además de otras especies como una máquina eléctrica para la elaboración de comprimidos de droga sintéticas, automóviles, munición, teléfonos celulares, balanzas digitales y dinero en efectivo.

Lo más singular, según explicó el fiscal Yáñez, es que el grupo formaba parte de un pool de minería de criptomonedas, una sofisticada operación mediante poderosas computadoras y equipos que permite maximizar las ganancias gracias a complicados cálculos matemáticos.

Para esto el grupo contaba con 19 equipos avaluados en varios millones de pesos que además requieren de una elevada inversión en costos de electricidad, ventilación y software. Por lo mismo, sólo 10 equipos estaban en funcionamiento.

Los siete sospechosos pasarán a control de detención y formalización este viernes por los delitos de tráfico de drogas e infracción a la ley de armas.