Las casas reales y los principales dirigentes del mundo se unieron este viernes en un homenaje unánime al príncipe Felipe, duque de Edimburgo y esposo durante casi siete décadas de la reina Isabel II, fallecido a los 99 años.
Una de las primeras monarquías en reaccionar fue la belga. “La muerte de su Alteza Real el príncipe Felipe, Duque de Edimburgo, nos entristece profundamente”, comunicaron el rey Felipe y su esposa Matilde, que extendieron su pésame a toda la familia real y al pueblo británico.
El duque de Edimburgo rindió una “larga vida de servicio a su país”, reaccionó por su lado el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas.
Felipe de Edimburgo “era un hombre de convicciones y principios”, expresó el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
Otro mandatario de la Commonwealth (Mancomunidad) británica, el primer ministro australiano, Scott Morrison, saludó un hombre que “encarnaba una generación que no volveremos a ver”.
El presidente ruso, Vladimir Putin, le deseó a la reina Isabel II “valentía y fortaleza mental ante esta dolorosa e irreparable pérdida”.
Putin le mandó un telegrama a la reina, indicó el Kremlin, en el que recordó que “muchos acontecimientos importantes en la historia moderna de su país están asociados con el nombre de su Alteza Real”.
En parecidos términos se expresó el expresidente de Estados Unidos, George W. Bush, quien aseguró que Felipe había representado al Reino Unido “con dignidad”.
El duque de Edimburgo fue el consorte real más longevo de la historia de la corona británica y una presencia constante a la sombra de la reina Isabel II.
“Durante más de setenta años ofreció sus servicios a la Corona (…) con dedicación ejemplar”, recordó el presidente italiano, Sergio Mattarella.
El ministro de Relaciones Exteriores checo, Tomas Petricek, optó por recordar la gran proyección de la monarquía británica en todo el mundo, herencia de su pasado imperial.
“Incluso una tribu del archipiélago de Vanuatu lo adora como un dios. Uno de los símbolos de la monarquía británica moderna se ha ido. Descanse en paz”, explicó.
El primer ministro holandés, Mark Rutte, envió sus condolencias al primer ministro Boris Johnson. “Nuestros pensamientos y simpatía van hacia la Familia Real británica”, indicó.
“El príncipe Felipe será muy añorado en Israel y en el mundo”, aseguró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Desde América Latina, uno de los primeros en reaccionar fue el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
“Un pésame a los familiares, amigos y al Reino Unido por la muerte del príncipe Felipe”, indicó.
Y desde Cuba, el canciller Bruno Rodríguez comunicó también sus “muy sentidas condolencias a Su Majestad Isabel II, Su Alteza el príncipe Carlos, a la familia real y al pueblo y gobierno británicos”.