Después de una larga discusión, la Cámara de Diputados despachó a ley el proyecto que establece el 15 y 16 de mayo de 2021 como feriados irrenunciables para los trabajadores del comercio, días en los que se llevarán a cabo las elecciones municipales, de gobernadores regionales y de convencionales.

La norma correrá para casi todos los comercios, exceptuando a las farmacias de urgencia, farmacias que deban cumplir turnos por normativa sanitaria y dependientes de combustibles. Además, incluye sanciones de incumplimiento que pueden alcanzar las 20 UTM por trabajador.

En ese contexto, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) manifestó su disconformidad por la aprobación de la iniciativa y la calificó como injustificada, advirtiendo que también perjudicará a los consumidores y llamó al Gobierno a establecer mecanismos de recuperación a la actividad.

El gerente general de la CCS, Carlos Soublette, indicó: “Esta medida es injustificada y desconectada de la realidad de cómo opera nuestra ciudadanía en jornadas electorales. Y peor aún, perjudicará aún más al sector del comercio, que se ha visto muy afectado por el efecto de las cuarentenas y restricciones en el marco de la crisis sanitaria, pese al esfuerzo que ha realizado para asegurar el abastecimiento de la población”,.

“Los trabajadores ya contaban con un permiso para poder ejercer su derecho a voto como corresponde. Cerrar por completo el comercio, por dos días, será un factor adicional para ahondar en la crisis económica del sector y retrasar su reactivación, afectando en mayor medida a pequeños y medianos empresarios”, agregó.

Más mesurado fue Carlos Stange, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), quien llamó a respetar la medida pero acusó: “El comercio debiera haber sido autorizado a funcionar, al menos uno de estos días, ya que, ante una medida inédita como es el cierre del comercio por 48 horas, la gente intentará abastecerse en los días previos, lo que puede generar aglomeraciones y el riesgo de que la población acuda al comercio informal donde no existen medidas de seguridad sanitarias”.

En la misma línea, Máximo Picallo, presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga) criticó que la normativa es “totalmente desproporcionada, no viene más que a agravar la situación económica del sector gastronómico pero además muestra una desconexión total con las reales necesidades que tiene el país en este momento”.

“Es absolutamente innecesario que se declaren dos días continuos como feriados irrenunciables. En el caso del sector gastronómico tal ves la única opción que tenía de funcionar era el delivery, una manera también de proveer alimentación a la población en momentos que todos están teniendo que guardar cuarentena por ser un fin de semana en que estamos la gran mayoría del país en fase 1 o en fase 2″, cerró.