“En Venezuela hay una dictadura. Es una dictadura, sí. En la situación que está no hay otra cosa que dictadura”, sentenció el expresidente de Uruguay, José “Pepe” Mujica, al comentar la situación en la que se encuentran los ciudadanos de ese país, sumidos en una crisis humanitaria, política y económica que aún no tiene salida.
Quien fuera un reconocido aliado de la administración de Nicolás Maduro, formuló estas declaraciones en una entrevista concedida a Radio Universal el fin de semana, oportunidad en la que sostuvo que así como en la nación caribeña, también “hay dictadura en Arabia Saudita, con un rey absoluto; en Malasia, donde matan 25 tipos por día (…) Y la República Popular de China ¿qué me dice?”.
No obstante esta opinión, Mujica insistió en que corresponde a los venezolanos encontrar la salida a esta crisis política. “Son ellos los que la tienen que resolver”, enfatizando en que debieran celebrar “elecciones con garantías” para deponer el régimen gobernante.
Dicho pensamiento es el que también ha expresado el partido Frente Amplio del ex jefe de Estado y su sucesor y actual mandatario, Tabaré Vázquez y que ha refrendado el candidato presidencial de la colectividad uruguaya, Danilo Martínez.
“El informe Bachelet es lapidario respecto a Venezuela y se trata de una dictadura. Hay que seguir trabajando en una salida negociada y que el centro sean los venezolanos”, escribió este último en Twitter.
Asimismo el ministro de Economía, Danilo Astori, dijo el viernes pasado que “en Venezuela hay una dictadura tremenda con impactos humanitarios muy graves”, a la vez que ratificó la postura de Uruguay ante la crisis venezolana, que al igual que México se ha marginado de reconocer al líder opositor, Juan Guaidó, como gobernante encargado.
“Valoro mucho los esfuerzos que ha hecho nuestro Gobierno por evitar lo peor. Hay cosas peores que esta y las peores son el baño de sangre, en primer lugar. Eso yo no lo quiero para Venezuela ni para ningún país en el mundo”, opinó el secretario de Estado.
La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un segundo mandato de seis años que no reconocen ni la oposición y una parte de la comunidad internacional.
Más de cuatro millones de venezolanos han abandonado el país en los últimos años a causa de la crisis humanitaria que sufre el país. Naciones Unidas advirtió que, si la tendencia continúa, a final de 2019 podrían sumar más de cinco millones.
Quien fuera un reconocido aliado de la administración de Nicolás Maduro, formuló estas declaraciones en una entrevista concedida a Radio Universal el fin de semana, oportunidad en la que sostuvo que así como en la nación caribeña, también “hay dictadura en Arabia Saudita, con un rey absoluto; en Malasia, donde matan 25 tipos por día (…) Y la República Popular de China ¿qué me dice?”.
No obstante esta opinión, Mujica insistió en que corresponde a los venezolanos encontrar la salida a esta crisis política. “Son ellos los que la tienen que resolver”, enfatizando en que debieran celebrar “elecciones con garantías” para deponer el régimen gobernante.
Dicho pensamiento es el que también ha expresado el partido Frente Amplio del ex jefe de Estado y su sucesor y actual mandatario, Tabaré Vázquez y que ha refrendado el candidato presidencial de la colectividad uruguaya, Danilo Martínez.
“El informe Bachelet es lapidario respecto a Venezuela y se trata de una dictadura. Hay que seguir trabajando en una salida negociada y que el centro sean los venezolanos”, escribió este último en Twitter.
Asimismo el ministro de Economía, Danilo Astori, dijo el viernes pasado que “en Venezuela hay una dictadura tremenda con impactos humanitarios muy graves”, a la vez que ratificó la postura de Uruguay ante la crisis venezolana, que al igual que México se ha marginado de reconocer al líder opositor, Juan Guaidó, como gobernante encargado.
“Valoro mucho los esfuerzos que ha hecho nuestro Gobierno por evitar lo peor. Hay cosas peores que esta y las peores son el baño de sangre, en primer lugar. Eso yo no lo quiero para Venezuela ni para ningún país en el mundo”, opinó el secretario de Estado.
La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un segundo mandato de seis años que no reconocen ni la oposición y una parte de la comunidad internacional.
Más de cuatro millones de venezolanos han abandonado el país en los últimos años a causa de la crisis humanitaria que sufre el país. Naciones Unidas advirtió que, si la tendencia continúa, a final de 2019 podrían sumar más de cinco millones.
