La exfuncionaria de la municipalidad de Ñuñoa, Iris Salaberry, desmintió al alcalde, Andrés Zarhi, respecto a los motivos que derivaron en su despido, asegurando que se trata de un montaje, y que tanto ella como su hermano son gente decente.
La mujer, quien fue acusada de intervenir en el caso del ahora renunciado subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry, luego que según un reportaje éste no respetara tres semáforos en rojo e insultar a un inspector municipal, aseveró que todo lo que ha ventilado es falso.
“No hubo altercado, mi hermano me llama para decirme que va a camino a la casa y que le parecía extraño que un auto lo iba hostigando, no existe (el insulto), no existió ningún acontecimiento”, indicó la desvinculada funcionaria de Ñuñoa en el matinal Bienvenidos de Canal 13.
Agregó que toda esta situación ha conllevado un enorme daño a su familia y a la de su hermano. “Somos gente decente (…) esto pasa por actuar bien”, aseveró.
En relación a quien estaba a bordo del vehículo al momento de los hechos, aseguró que iban cinco personas: ella, su hijo, su madre de 82 años, Felipe y un hijo de él.
Finalmente, Iris Salaberry manifestó que Zarhi, mintió al decir que ella intervino en el caso de su hermano.
“Jamás hubo tráfico de influencias”, sentenció, la afectada que informó que este viernes se querellará contra el jefe comunal y los funcionarios municipales involucrados en la situación que niega totalmente.
