Chile se posicionó en el primer lugar a nivel mundial entre quienes perciben un aumento en el incremento de la delincuencia, en el último informe de la empresa Ipsos denominado “Miradas sobre el Crimen y las Fuerzas de Seguridad Alrededor del Mundo”.

En la encuesta realizada a más de 19 mil personas en 29 países, se estableció que dos de cada tres chilenos consideran que ha existido un aumento de la delincuencia en su barrio, el doble que el promedio mundial (34%).

De esta forma, el primer lugar fue ocupado por Chile (68%), seguido de Argentina (64%), Perú (64%), Sudáfrica (64%) y Colombia (64%).

El director de estudios públicos de Ipsos, Pablo Alvarado, señaló que “los ciudadanos latinoamericanos son quienes manifiestan una mayor sensación de incremento de la delincuencia en su entorno cercano durante el último año. Si bien, se trata de una percepción que tiene respaldo en las altas tasas de criminalidad existentes en los países de la región, el análisis de cada país debe considerar elementos particulares”.

“En el caso de Chile, por ejemplo, esta sensación presumiblemente viene dada por el rápido incremento de delitos violentos asociados al crimen organizado en el último tiempo, lo que ha causado un gran revuelo en términos mediáticos”, precisó.

La encuesta realizada midió la “Incidencia percibida de delitos”, en este ítem cuatro de cada cinco chilenos (80%) afirmó haber visto o escuchado la ocurrencia en su barrio de robos de delitos.

Asimismo, dos de cada cuatro entrevistados nacionales (72%) manifestó haber visto o escuchado respecto a delitos de vandalismo en donde viven. Además, tres de cada cuatro (76%) comentó que ha escuchado respecto al alza del consumo de drogas ilegales en sus vecindarios.

Por otro lado, Chile se ubicó en el décimo lugar a nivel mundial respecto a haber escuchado sobre violencia contra mujeres (52%) y niños (425) en sus lugares de residencia.

TRÁFICO DE DROGAS

En cuanto al tráfico de drogas, el país obtuvo el segundo lugar en el ranking, con dos de cada tres personas chilenas (66%) que señalaron que han visto o escuchado respecto a este problema en sus barrios.

“En los países latinoamericanos se perciben con mayor frecuencia la ocurrencia de delitos en las cercanías del hogar. Si bien, estos resultados no necesariamente se condicen con datos duros (índices de denuncia o victimización), sí entregan información relevante en lo que respecta a las sensaciones cotidianas de las personas, lo que también tiene consecuencias directas en el diario vivir”, explicaron.

En esta línea, comentaron que “para Chile, las percepciones de aumento de criminalidad están en línea con los países latinoamericanos, pero a diferencia de la gran mayoría de ellos (México, Brasil o Colombia), Chile posee mejores indicadores objetivos, por lo que se puede señalar que las sensaciones que tienen los chilenos están amplificadas o se viven de manera más intensa dado el crecimiento reciente de lo que señala la realidad”.

Sobre las fuerzas de seguridad y orden, Chile se destacó por tener resultados sobre el promedio mundial en relación a la confianza que tienen las personas en que estas fuerzas puedan evitar ciertos tipos de delitos. En el país el 52% piensa que pueden evitar delitos violentos y el 53% que pueden evitar crímenes no violentos.

También, el 64% de los chilenos, es decir dos de cada tres encuestados, confía que las fuerzas de seguridad y orden traten a todos los ciudadanos con el mismo nivel de respeto.

“Chile destaca en la región en lo que respecta a la confianza que sienten sus ciudadanos con las policías. Si bien, no se alcanzan los niveles máximos de confianza que se pueden observar en países como Singapur o España (que lideran el ranking internacional), si se obtiene un respaldo mayoritario en la población, lo que constituye un activo importante para la labor policías y la sensación de los ciudadanos”, sostuvieron.

Por último, el informe detalló que tres de cada cinco chilenos (59%) piensa que la prioridad es detener o reducir la delincuencia, un 34% que es la creación de trabajos e impulsar la economía, y un 8% que lo prioritario es el medioambiente y la salud.