Muchas personas terminan sus estudios universitarios y se preguntan, ¿ahora qué? Y es que son muy pocos los afortunados que encuentran trabajo en lo que de verdad les gusta cuando terminan su formación. Una de las grandes opciones es, sin duda, seguir formándose.
Pero esta opción no es únicamente recomendable para aquellos que acaban de salir de la universidad. Seguir estudiando, incluso años más tarde de haber terminado, es una gran alternativa para seguir adquiriendo conocimientos, seguir al día de las novedades del sector y, cómo no, optar a nuevas y mejores oportunidades laborales.
Y es que vivimos en la época de la inmediatez, de los avances tecnológicos, de los cambios rotundos y debemos estar preparados en todo momento.
Seguir estudiando después de la universidad puede ayudarnos a mantenernos siempre actualizados, sea cual sea el sector laboral. Y son muchas las opciones: cursos, especializaciones, másteres, diplomaturas, posgrados, etc. Entre los profesionales que más requieren de esta formación continuada encontramos el sector de la sanidad, puesto que los avances son cada vez más importantes y se llevan a cabo de manera más rápida.
Entre las opciones formativas para este sector, tan importante para todos, encontramos cursos para enfermería online, seminarios presenciales para médicos, charlas y encuentros con investigadores y otros profesionales del sector, entre otros.
¿Qué ventajas tiene seguir estudiando después de conseguir el título universitario?
Al igual que el sector de la salud, muchas otras áreas precisan de una constante actualización de conocimientos por parte de sus profesionales. La publicidad, las finanzas o la tecnología, por supuesto, son sectores que también se mantienen en continuo cambio, de ahí que surja la necesidad de seguir formándose.
Pero esta no es la única razón. Y es que las personas que deciden seguir estudiando una vez finalizada su carrera universitaria obtienen grandes beneficios, tal como se detalla a continuación:
- Ayuda a los profesionales a mantenerse al día de las últimas tendencias de su sector, evitando así caer en la obsolescencia.
- También ofrece un extra de calidad a su labor, aportándole nuevos conocimientos.
- Esto, además, permite ampliar horizontes en su carrera profesional, mejora su currículum y, por ende, incrementa las posibilidades de optar a un mejor puesto o a nuevas oportunidades laborales.
- Seguir estudiando, en muchas ocasiones, permite conocer a nuevas personas, ampliando así los contactos en el sector que, una vez más, puede ayudar a conseguir nuevas oportunidades.
- Ayuda a que la propia persona se sienta bien consigo misma, satisfecha, orgullosa de lo que está consiguiendo y lo que puede llegar a alcanzar en su carrera profesional.
Pensando en retomar los estudios, ¿por dónde empezar?
El aspecto clave a la hora de retomar los estudios una vez finalizada la universidad, ya sea inmediatamente después de terminar o bien pasado un tiempo, es la motivación. Es importante tener en cuenta el esfuerzo que supone estudiar, pero también los resultados que se pueden obtener y las ventajas previamente indicadas.
Otro punto básico para seguir estudiando después de la universidad es la fijación de objetivos. Qué se quiere estudiar, para qué y el plazo en el que se desean finalizar estos nuevos estudios son aspectos imprescindibles a tener en consideración antes de empezar.
Una vez se tienen claros los objetivos, es momento de establecer el modo de conseguirlos. Es posible alcanzar estas metas a través de distintas vías de estudio, ya sea un máster, un curso de especialización o similares, por lo que hay que valorar todas las opciones disponibles antes de tomar una determinación.
Y por último, una vez elegido el tipo de formación y la materia a estudiar, viene lo más importante: esforzarse para alcanzar los objetivos fijados.
Distintos tipos de formación disponibles después de la universidad
Como se comentaba anteriormente, a la hora de plantearse seguir estudiando después de la universidad, existen numerosas alternativas de formación. Dependiendo de las necesidades, los deseos y objetivos fijados unas serán más interesantes que otras.
Entre las principales opciones encontramos:
- Máster oficial: se trata de un postgrado verificado por el Ministerio de Universidades y reconocido por el Espacio Europeo de Educación Superior. Suelen durar entre uno y dos años y una vez finalizada esta formación es posible acceder a un doctorado.
- Máster propio: las características son similares a las de un máster oficial en cuanto a contenidos, pero no están avalados por el Ministerio de Universidades ni por el Espacio Europeo de Educación Superior, simplemente por la propia universidad o centro educativo y su prestigio.
- Cursos de especialización, diplomas o similares: las universidades y centros educativos ofrecen otro tipo de postgrados, los títulos propios, más enfocados en la especialización de una materia en concreto, con una menor duración. Entre las principales opciones encontramos los cursos de especialización, los diplomas, los cursos de experto, los cursos de perfeccionamiento, los certificados de formación permanente, etc.
- Otro grado universitario: otra de las grandes opciones disponibles es estudiar otra carrera universitaria. En muchas ocasiones, cuando el nuevo grado universitario está relacionado con el que se ha finalizado, es posible convalidar asignaturas, disminuyendo el tiempo requerido para completar estos nuevos estudios.
- Oposiciones: una alternativa para conseguir trabajo una vez finalizada la universidad son las oposiciones. Se trata, por lo general, de estudios exigentes, pero una vez se consigue la plaza, es para siempre.
- Formación no reglada: existen múltiples cursos no oficiales, que no ofrecen titulación concreta, pero sí conocimientos específicos acerca de determinados temas.
¿Entiendes ahora la importancia de seguir estudiando después de la universidad?