Fernando Paulsen ha sido tendencia en redes sociales estos días por sus declaraciones en el minuto de confianza en “Tolerancia Cero”, donde apuntó al sector de la Democracia Cristiana que apoya al Rechazo.
El periodista apuntó a figuras como Ximena Rincón y Matías Walker, que usaron la Franja del No para hacer una propaganda que llama a rechazar la nueva Constitución.
“Hace unos días reapareció en redes sociales un video mío de Radio La Clave, cuando conversando con Mirko Macari di mi opinión sobre algunos excolaboradores del segundo gobierno de Michelle Bachelet, que planteaban que la lucha que ellos habían librado contra la dictadura no merecía una inclinación hacia la izquierda, que apreciaban en ese gobierno”, comenzó diciendo.
“Independiente de la legítima crítica política que puede conllevar esa afirmación, mi punto se centró en todos aquellos que jamás estuvieron en primera línea alguna de la oposición material en calles, sindicatos y otras organizaciones civiles, durante la dictadura, pero que se apoderaban de los triunfos de la entonces oposición, como si hubieran dado la batalla más física y personal de sus vidas”, añadió.
Y continuó diciendo que “la Franja del No fue un acto pluralista como quizás nunca se ha visto en Chile. Me tocó ser encargado de la sección de noticias de esa franja, donde reporteábamos hechos que sabíamos nunca serían emitidos por los canales oficiales”.
“Mostramos las decenas de marchas desde el 11 de mayo de 1983, cuando Rodolfo Seguel, como dirigente sindical de Codelco, llamó a la primera de ellas. Entrevistamos a decenas de dirigentes de todos los partidos, en el exilio o en Chile, que dieron la cara para hablar del retorno a la democracia. Mostramos las miles de heridas y crímenes que entonces sufrían quienes pensaban distinto y lo decían en esa época. Junto a secciones de propaganda por el No, había otras de humor, con canciones e imágenes de esperanza, donde se pedía -simplemente- votar que No”, prosiguió.
Y parar cerrar, el periodista cerró con fuertes críticas: “Nadie tiene derecho a ensuciar esa campaña por el No, para sacar ventajas políticas hoy, en democracia. Menos, muchos que hoy hacen gárgaras de haber sido adalides de esa movilización, a quienes nunca se les vio cuando las papas quemaban. Traer el pasado para inducir el presente es lícito cuando corresponde. Apropiarse del costo y del esfuerzo de otros, para capitalizarlo en beneficio propio, sea el tiempo que sea, en cualquier lugar del planeta, es, simplemente, un acto de cobardía”, cerró Paulsen.
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