Un hecho lamentable empañó la noche de este jueves el desarrollo del encuentro entre Colo Colo y Fortaleza en el Estadio Monumental, partido válido por la segunda fecha del grupo E de Copa Libertadores.
Corría el minuto 70’ y con el marcador igualado a cero, cuando un grupo de hinchas albos rompió un acrílico en la galería norte que separaba la barra del Cacique del terreno de juego, e hicieron ingreso a la cancha.
A raíz de esta situación, tanto el plantel como el cuerpo técnico del conjunto brasileño abandonó rápidamente el césped y se dirigió hacia camarines, mientras los jugadores del elenco popular intentaban calmar los ánimos.
Aunque los barristas volvieron a su zona, los futbolistas visitantes se mantuvieron en los vestuarios y al cabo de unos minutos, hasta los locales y los árbitros salieron del gramado del recinto de Macul.
Hasta el cierre de esta nota, Conmebol aún no informaba qué ocurriría con el pleito, si se podría retomar o se debía programar para otra fecha.
Es importante consignar que en la previa del duelo, dos fanáticos del equipo dueño de casa fallecieron tras incidentes con Carabineros, situación que provocó la molestia de la gente en el reducto deportivo. Fue precisamente en este contexto que se produjeron los incidentes antes mencionados.