El actor de “Adrenalina”, Juan Pablo Sáez, está en el centro de la polémica tras protagonizar un episodio de violencia intrafamiliar junto a su exesposa, Camille Caignard. Ambos quedaron detenidos y pasaron a control de detención el sábado; él fue dejado en libertad con la medida cautelar de prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima.

Tomás Brass, hijo de Caignard, reveló en ‘Primer Plano’ los pormenores de lo que desató el incidente: “Todo se inició por la custodia de su hermana de 12 años”, explicó el joven.

Según relató al mismo programa, tras su separación hace algunos meses, los padres acordaron que, para el bienestar de la menor, ésta permanecería en el hogar familiar y ellos se alternarían semana por medio para vivir con ella y cuidarla.

Brass añadió que se definió este arreglo porque la residencia, propiedad de Juan Pablo Sáez, está cerca del colegio y de las actividades extracurriculares de la niña. Sin embargo, aunque ambos cumplían con el convenio, el pasado viernes, cuando Camille llegó a iniciar su turno, el actor se negó a abandonar la vivienda.

Esto detonó un altercado entre ambos, durante el cual Sáez dijo a ‘Primer Plano’: “Yo jamás le he pegado a una mujer, ni le pegaría jamás, aunque me esté agrediendo que es lo que me pasó (…) (El gas pimienta) me llegó muy fuerte a los ojos y la boca, y yo sí perdí la respiración un rato y me asusté mucho”.

En cuanto a las lesiones que constató su exesposa, Sáez las atribuyó a un juego con su hija en común: “ella hizo una voltereta, se golpeó la columna y terminó con un ‘esguince cervical’”, motivo por el cual la menor lleva un cuello ortopédico.

No obstante, el conflicto no concluyó ahí, ya que, según Brass, la noche de este domingo el abogado de Juan Pablo Sáez, acompañado de personal policial, se presentó en el domicilio que la ex pareja compartía para intentar desalojar a Camille y a su hija.