El diputado Gaspar Rivas (Partido de la Gente) protagonizó un particular momento en el marco de su participación de la comisión revisora de la acusación constitucional contra el exministro de Relaciones Exteriores, Andrés Allamand.

Según el libelo acusatorio, el excanciller habría incurrido en un “notable abandono de deberes” al realizar un viaje a España cuando el norte grande del país atravesaba una crisis migratoria.

La exautoridad terminó renunciando en febrero de este año a la Cancillería para asumir como secretario general de la Comunidad Iberoamericana en España.

En ese marco, durante la mañana de este martes, Rivas realizó una intervención dirigiéndose a uno de sus colegas integrantes de la comisión revisora, el diputado Cristián Labbé (UDI), asegurando que “su canciller fue como las pelotas”.

“Se mandó a cambiar cuando Chile lo necesitaba. Yo en su momento lo apoyé, en 2013, y no lo apoyaría nunca más a ese sujeto. Nunca más. Cómo se le ocurre mandarse a cambiar cuando Chile lo necesita, carajo”, expresó airadamente el legislador.

Luego de emitir sus palabras, se le solicitó al parlamentario que actuara “con respeto”, a lo que Rivas respondió diciendo “respeto por la gente. ¡Hasta cuando con las defensas corporativas! El mío no se toca porque piensa como yo, carajo. No se toca”.

Más tarde, el legislador dio explicaciones por sus declaraciones: “Al final terminan molestando estas defensas corporativas que se hacen constantemente de uno y otro sector. Lo que yo acusé es la molestia respecto de entender que algunas personas, algunos diputados, van a su puesto en la comisión bajo la lógica de que al mío, al que piensa como yo, no se le toca”.

“La gente nos solicita que golpeemos la mesa, y que utilicemos la fuerza con la que ellos mismos nos han llevado al puesto que estamos ocupando. Por eso mismo, es que yo golpeé la mesa e hice presente esa manera de referirme”, puntualizó.