“Reafirmamos nuestra condena a la dictadura de Nicolás Maduro. No aceptamos esta burla a la democracia”, afirmó Macri en una declaración conjunta tras reunirse con Bolsonaro en el palacio presidencial de Planalto.
“La comunidad internacional ya se dio cuenta: Maduro es un dictador que busca perpetuarse en el poder con elecciones ficticias, encarcelando opositores y llevando a los venezolanos a una situación desesperante”, añadió.
Macri ya había proferido comentarios similares el jueves pasado, cuando Maduro asumió un nuevo periodo de gobierno. Este miércoles fue mucho más enfático en sus críticas al gobierno de Venezuela que su homólogo brasileño, a quien el presidente venezolano tildó la víspera de “Hitler en tiempos modernos”.
Bolsonaro, que suele ser especialmente crítico con las “dictaduras” de Venezuela, Cuba y Nicaragua y le ha dado un giro diplomático radical a su país, se limitó a decir que la cooperación de Argentina y Brasil en relación a la situación en Venezuela es “el ejemplo más claro” de la “convergencia de posiciones” entre los dos países, sin mencionar directamente a Maduro.
Macri recordó que Argentina y Brasil, en el marco del Grupo de Lima, consideran ilegítimo el nuevo mandato de Maduro y reconocen en su lugar a la Asamblea Nacional como “única institución legítima” en el país caribeño.
El martes, el Parlamento venezolano, único poder controlado por la oposición, prometió amnistiar a los militares que desconozcan al “usurpador” Maduro, cada vez más aislado internacionalmente.
Su nuevo mandato desconocido por Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina, alegando que es resultado de elecciones viciadas.